Cancela el gobernador la cena de gala; dirigiría su atención a seguir evaluando los daños y las acciones para apoyar a los damnificados del huracán Max, dice. Pide un minuto de silencio para las víctimas del terremoto en Oaxaca y Chiapas
Beatriz García
Chilpancingo
Por segundo año consecutivo, el gobernador Héctor Astudillo Flores encabezó la ceremonia del grito de Independencia en la capital, donde hubo poca presencia policiaca resguardando la zona.
En un comunicado, el gobernador informó que luego de las afectaciones del huracán Max, instruyó a cancelar la cena de gala que se ofrece cada año al terminar la ceremonia, porque dirigiría su atención a seguir evaluando los daños y las acciones emprendidas para apoyar a los damnificados.
Durante el acto, Astudillo Flores pidió un minuto de silencio para las víctimas del terremoto en Oaxaca y Chiapas.
La actividad conmemorativa del Día de la Independencia se celebró en la explanada de Palacio de Gobierno, donde cientos de asistentes se congregaron, en su mayoría vistiendo trajes típicos del estado, aunque el lugar no lució lleno.
A la 5 de la tarde inició la verbena popular, donde los presentes degustaron antojitos mexicanos.
El Palacio fue acordonado a unos 100 metros, y esta vez sólo hubo tres detectores de metal y los hombres fueron revisados.
Hubo pocos policías estatales, bomberos y socorristas de Protección Civil, sólo en el puesto de revisión, mientras que en la entrada del Palacio de Gobierno, hubo otros pocos que permitían el paso libre.
Afuera del Palacio, decenas de jóvenes y adultos tomaban bebidas alcohólicas que compraron en la tienda que se ubica a un lado, pues a la explanada no se permitió el ingreso de estas bebidas.
Sin embargo, para quienes estuvieron afuera se colocó una pantalla gigante en la que se trasmitió el acto protocolario y espectáculo musical.
Antes del acto oficial, en uno de los dos escenarios se presentó el cantante Yahir, quien culminó su participación a las 10:30 de la noche para pedir a los presentes que se congregaran frente al edificio Región Centro, donde el mandatario estatal saldría a dar el Grito.
El gobernador estuvo acompañado de un pequeño grupo, su esposa Mercedes Calvo, presidenta del DIF Guerrero; el secretario general de Gobierno, Florencio Salazar Adame; el fiscal general del estado, Javier Olea Peláez; el alcalde capitalino, Marco Antonio Leyva Mena; el ex alcalde de Acapulco, Manuel Añorve Baños; la presidenta de la junta de coordinación política del Congreso del estado, Flor Añorve; la diputada federal priista, Verónica Muñoz Parra; diputados locales y autoridades militares.
Minutos antes de las 11 de la noche, el contingente político salió al balcón del edificio. Antes del Grito, el orador solicitó “con mucho respeto” un minuto de silencio en memoria de los vecinos de Oaxaca y Chiapas que perdieron la vida en el sismo pasado, y de un guerrerense fallecido ante los estragos del huracán Max, tras de lo cual,
Astudillo Flores exclamó, “Mexicanos, guerrerenses, ¡viva la independencia nacional!, ¡Viva los héroes que nos dieron patria y libertad!, ¡Viva Hidalgo!, ¡Viva Morelos!, ¡Viva Allende!, ¡Viva Josefa Ortiz de Domínguez!, ¡Viva Aldama y Matamoros!, ¡Viva Vicente Guerrero, viva Vicente Guerrero!, ¡Viva México, viva México, viva México!”.
Luego, el presidente municipal de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena tocó la campana, mientras el gobernador ondeaba la bandera, para después, todos juntos, entonar el Himno Nacional.
Luego hubo un espectáculo de juegos pirotécnicos que duró unos 15 minutos, mientras tocaba un mariachi. La actividad finalizó la con la presentación de la Sonora Santanera.
