25 octubre,2017 6:10 am

Promete la Sedatu a damnificados de Tierra Colorada pagar un terreno para 34 viviendas

Chilpancingo, Gro., 25 de octubre de 2017. Damnificados de hace cuatro años por los fenómenos meteorológicos Ingrid y Manuel se reunieron con el delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), José Manuel Armenta Tello, en Tierra Colorada, municipio de Juan R. Escudero, y les dijo que se liquidarán los 200 mil pesos que se adeudan del terreno donde se construyen 34 viviendas, y que hablará con la empresa constructora para que agilice las edificaciones.

Mientras que en un comunicado la dependencia señala cumplió los pagos para la empresa encargada de la obra, y que el atraso de la construcción no es responsabilidad de la Sedatu, y la empresa tendrá que dar una explicación.

Como parte del compromiso del delegado ante las protestas acudió este martes a Tierra Colorada a reunirse con los habitantes.

En consulta telefónica el comisario Pantaleón Mesino Flores contó que el delegado se comprometió a que este lunes finiquitaría los 200 mil pesos que se deben del terreno, y que hablará con la constructora ante el atraso de las construcciones.

A los damnificados no les dieron fecha de cuándo estarían terminadas las viviendas, pero estarán pendientes pues tiene que ser antes de que termine el año, dijo el comisario.

Las familias continúan viviendo en el Papagayo. Con lámina que les proporcionó Protección Civil estatal rehabilitaron sus casas para seguir habitándolas, mientras se terminan las viviendas donde serán reubicados.

En el comunicado de la Sedatu se indica que “el grupo de habitantes notablemente molestos emplazaron a la dependencia para cambiar la empresa constructora, y además concluir con el pago donde se construye el fraccionamiento, de lo contrario dijeron tomarán medidas drásticas entre éstas bloquear el lunes la Autopista del Sol”.

Manifiesta que Armenta Tello expresó que no era posible que después de cuatro años los damnificados siguieran sin un hogar, que entendía su molestia y preocupación y les propuso mantener el diálogo para solucionar y concluir la construcción de sus viviendas.

Resalta que el proceso de la reconstrucción se ha detenido por distintos motivos como demandas legales contra las empresas, clausuras ambientales por omisiones, pero que se ha atendido cada caso y que en ningún momento el delegado ha sido omiso ni indolente ante la preocupación de las familias.

Se informa que el delegado aseguró que el proceso de reconstrucción que enfrentan los damnificados del huracán Max y los dos sismos de septiembre, será distinto porque no se puede permitir que ocurra lo mismo.

“La localidad de Papagayo se encuentra ubicada a una hora aproximadamente del puerto de Acapulco, y fue mencionada en medios nacionales porque en un primer momento les construyeron viviendas en un sistema denominado palafitos, los damnificados no aceptaron y les llamaron periqueras, además denunciaron no tenían las medidas para ser habitadas. Actualmente esperan que a través de la Sedatu, se termine con la edificación de sus viviendas en un sistema adaptado a sus usos y costumbres”, expone el comunicado.