8 octubre,2017 8:03 am

Se presenta el músico panameño Kevin Tiboche con la Filarmónica de Acapulco  

Acapulco, Gro., 7 de octubre de 2017. El repertorio incluyó piezas épicas de Mozart y momentos de divertimento con Stravinsky.

Con la presentación del músico panameño Kevin Tiboche y el Concierto para oboe de Wolfgang Amadeus Mozart, la noche del viernes la Orquesta Filarmónica de Acapulco (OFA) celebró su concierto de temporada en el teatro Juan Ruiz de Alarcón, en el Centro Internacional Acapulco.

Antes, la OFA interpretó la obertura de La flauta mágica, una ópera también de Mozart, y último trabajo que dirigió en persona antes de morir, y que con su carácter mágico, épico e irreal preparó el ambiente para la presentación de Toboche.

Instalado sobre el escenario, el músico panameño dio cuenta del Concierto para oboe que con sus formas expresivas y melodiosas volvió al solista el centro de atención.

De tres movimientos (Allegro aperto, Adagio non troppo y Rondó: Allegretto), la obra logró en sus 20 minutos de duración, el aplauso generoso de la gente y ante el que el músico reaccionó regalando un encore: Core ‘ngrato, aria escrita por Salvatore Cardillo y que tenores como Plácido Domingo, Luciano Pavarotti o José Carreras hicieran famosa en los últimos años.

Luego del intermedio, siguió el turno para un par de obras de Igor Stravinsky: Circus polka y El pájaro de fuego, las seleccionadas.

Mientras la primera, Circus polka (para elefantes jóvenes), es un sencillo ballet del siglo pasado, originalmente escrito, en efecto, para elefantes, toda una broma por parte del propio Stravinski; la segunda, El pájaro de fuego, es otro ballet pero inspirado en historias folclóricas rusas.

Audazmente original y extremadamente colorido, el ballet, un relato coreográfico en dos partes y siete cuadros da cuenta de la historia de un príncipe que, ayudado por el Pájaro de fuego, rescata a una princesa secuestrada por un brujo que transforma a todos sus enemigos en estatuas de piedra.

Destacando partes como la Danza del pájaro de fuego, de notable audacia rítmica, o La danza infernal,  el movimiento de mayor efecto y donde brilla la originalidad de los ritmos y timbres, finalmente la obra interpretada por la orquesta fue bien recibida y aplaudida por los poca más de 700 asistentes al concierto en el teatro.

El próximo concierto de la segunda temporada Destellos sinfónicos será, a decir de su programa, el próximo viernes 20 de octubre.

 

Texto y foto: Óscar Ricardo Muñoz Cano