8 enero,2021 5:40 am

2021: las alianzas

Ángel Aguirre Rivero

La Política es Así

 

Para transformar Guerrero no bastan las buenas intenciones. En un año electoral como lo es 2021, los candidatos y sus partidos presentarán propuestas, registrarán una plataforma electoral y algunos harán consultas a la sociedad para integrar un plan de gobierno. Pero de nada les servirá trazar una ruta si no ganan la elección.

Los escenarios de la política siempre cambian, por eso me llama la atención que en un sondeo que el periodista José Cárdenas hizo en su cuenta de Twitter, con la pregunta: ¿Por quién votarás en las próximas elecciones?, el 11 por ciento opta por Morena, 76.6 por ciento por la alianza PRI-PAN-PRD; el 7 por ciento se declara indeciso y el 5.5 por ciento asegura que no votará.

Aunque Morena aventaja en muchas encuestas, hoy se han acumulado muchos factores que seguramente modificarán la intención del voto.

Candidaturas en el PRD

Hace unos días me reuní con los representantes de las principales expresiones al interior del PRD y su presidente, diputado Alberto Catalán Bastida.

Debo reconocer en primer término la actitud madura y el ánimo de reconstruir el partido a partir de desterrar viejos vicios que tanto daño le han hecho, coincidimos todos que quienes nos representen en la contienda electoral que se avecina sean verdaderamente competitivos y que se deseche el reparto de cuotas sólo por ser parte de alguna de las corrientes que participan al interior del partido que fundara el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas y el licenciado Porfirio Muñoz Ledo.

¿Qué significa esta decisión? Quiere decir que si integrantes de Nueva Mayoría, ADG o IPG o de cualquier otra expresión, resultan ser los que tienen mayores posibilidades de triunfo, irán ellos, sin importar el número de candidaturas que lleven.

Otro de los criterios que se asumieron es que defenderemos los municipios donde somos gobierno para encabezar la alianza, y en aquellos que no están gobernados ni por el PRD ni por el PRI, habrá las mediciones necesarias para determinar al candidato o candidata que nos represente.

Esto no significa que necesariamente irán a la reelección quienes actualmente ostentan el cargo, pero sí que pertenezcan al partido que hoy esté gobernando.

En un acto de honestidad y congruencia política, uno de los representantes de estas expresiones puso como ejemplo el caso de uno de sus seguidores que hoy gobiernan un municipio, pero reconoció que su desempeño no ha sido el mejor y que por tanto, debía de explorarse quién nos va a representar, aun siendo del otro partido con quien vamos en coalición, actitud ejemplar y digna de admirarse.

También acordamos privilegiar la participación de muchas mujeres y jóvenes, no sólo para cumplir con el requisito de género sino por una convicción de abrir cada vez más los cauces de participación política de estos dos sectores y de la sociedad civil.

Las alianzas

En Guerrero la alianza camina muy bien y estoy seguro que si mantenemos esta actitud, los resultados serán muy positivos, no tengo duda.

Recordemos que en la elección de 2018 hubo en Guerrero un fenómeno de voto diferenciado, donde los guerrerenses le otorgaron la mayoría de los ayuntamientos al PRD y al PRI, y una presencia significativa a estos partidos en el Congreso local.

A pesar de que el presidente López Obrador ganó de manera contundente en la entidad, Morena no tuvo el voto mayoritario en territorio.

En 2018 de manera equivocada, se habló de un derrumbe de los partidos políticos que durante décadas ejercieron el poder. Pero muy pronto, en 2020, las elecciones de Coahuila e Hidalgo dejaron en claro que nada está escrito.

Del anecdotario

Sabina, de profundos rasgos indígenas amuzgos, terminó su preparatoria y decidió emigrar a Acapulco en busca de nuevos horizontes.

Trabajó durante tres años como camarista en un hotel, donde tenía que asear 15 habitaciones cada día con un sueldo de 250 pesos diarios.

En su estadía en el puerto conoció a un joven amuzgo quien trabajaba como integrante de la Secretaría de Marina. Decidieron vivir juntos bajo el compromiso de que un día habrían de casarse.

Uno de esos días, Sabina recibió un mensaje de su prima con quien habían crecido, para comunicarle que pronto se uniría en matrimonio con un joven marino a quien había conocido en una de las playas del puerto.

Sabina le pidió que le mandara una foto de su novio, ¿y qué cree?, se trataba precisamente de su pareja, quien le había prometido llevarla al altar.

Muy enojada y decepcionada, Sabina lo dejó y le platicó la historia a su prima, quien muerta de cólera decidió hacer lo mismo con el engañifas.

Ante su fracaso amoroso, Sabina decidió emigrar a la Ciudad de México, donde encontró un empleo en una fábrica que elabora refacciones para autos.

Su sueldo mejoró considerablemente y sólo trabaja ocho horas, por lo que ha decidido estudiar la carrera de herbolaria para continuar las tradiciones de su pueblo, a donde espera regresar un día y dedicarse a curar a sus hermanos a base de yerbas y otros rituales.

Me platicó que tiene una hermana que es “tono” de tigrillo, y que le profesa una profunda admiración a una nahual que vive muy cerca de su comunidad, y que quiere seguir sus pasos en esta hermosa profesión.

Se dice que el “tono” es un recién nacido que fue llevado al cruce de un camino, donde diversos animales pasaron a lamer al, o a la recién nacida y el animal que sea el último en lamerlo, cuando el niño o niña crezca, tomará las características de ese animal. En ese tenor puedes encontrar personas que se dicen ser tonos de tigre, lagarto, lobo, víbora, etcétera.

Es una creencia aún muy arraigada entre los pueblos negros e indígenas, lo cual hace muy difícil la labor del médico, porque le exigen que cure también al animal al cual ellos pertenecen según sus tradiciones.

La vida es así…