11 mayo,2018 12:42 pm

Thiem frena a Nadal: fin a la racha y adiós al número uno (video)

Texto: DPA / Foto y video: (@Tenis_Break) Twitter
Madrid, España, 11 de mayo de 2018. El español Rafael Nadal sufrió este viernes su primera derrota en polvo de ladrillo en 12 meses al caer con el austríaco Dominic Thiem por 7-5 y 6-3 en los cuartos del torneo de tenis de Madrid.

Nadal, que el lunes se despedirá del número uno del ranking, llevaba 21 triunfos seguidos en arcilla sin ceder un solo set. Su última derrota había sido precisamente ante Thiem, el 19 de mayo de 2017 en los cuartos de Roma.

El campeón de 16 Grand Slam llegaba en una dinámica fantástica al reto con Thiem, montado en una ola de confianza tras sus títulos en Montecarlo y Barcelona. Pero hoy sufrió un frenazo en seco ante un Thiem valiente y agresivo, que jugó a tumba abierta.

El austríaco se enfrentará mañana en semifinales al sudafricano Kevin Anderson, número ocho del ranking, que superó antes al serbio Dusan Lajovic por 7-6 (7-3), 3-6 y 6-3 en dos horas y 12 minutos.

Incómodo, errático y sin armas para contener a Thiem, Nadal se despidió de Madrid, de su récord de sets consecutivos ganados en una misma superficie (se quedó en 50) y del número uno. La posición de máximo privilegio quedará el lunes en poder del suizo Roger Federer.

El español Rafael Nadal

El encuentro de hoy además dibuja un nuevo escenario de cara a Roland Garros. Thiem dejó claro que Nadal no es imbatible en tierra. Y eso que el austríaco tenía muchas dudas el día anterior. “Voy a salir a ganar, aunque no es un objetivo muy realista viendo su juego y el mío ahora mismo”, aseguró Thiem, que hace un par de semanas fue aplastado por Nadal en Montecarlo con un 6-0 y 6-2.

“Si quiero ganarle, tendré que jugar uno de los partidos de mi vida. Ser muy agresivo y no cometer muchos errores”, añadió. Dicho y hecho.

Hoy quedó claro desde el primer momento que era el día de Thiem y no el de Nadal. El español no transmitió buenas sensaciones en ningún momento y el austríaco fue un martillo con la derecha y mantuvo a su rival siempre por detrás de la línea de fondo. Desde ahí, Nadal es mucho menos Nadal.

El español salvó dos pelotas de break en el primer juego, pero en el 3-3 ya no pudo hacer nada y Thiem se adelantó en el marcador. Fue en ese final del primer set cuando más sufrió el austríaco: verse a un suspiro de ganar un parcial a Nadal le generó cierta ansiedad y cuando sacaba para llevarse la primera manga perdió su servicio con varios errores y una doble falta.

Pero fue espejismo, porque Thiem no perdió la concentración y le devolvió el break inmediatamente en un juego plagado de fallos del español. Cuando el reloj marcaba la hora y cinco minutos, Thiem sentenció el primer set con un ace.

“Rafa está un poco nervioso desde el principio”, señaló Carlos Moyá, su entrenador, tras ese primer set. “Está set abajo en arcilla, es una situación en la que no ha estado desde hace tiempo. Tiene que jugar más tranquilo porque con la derecha está haciendo poco daño y cometiendo errores”.

Pero el panorama no cambió en el segundo parcial. Nadal siguió jugando muy por detrás de la línea, a merced de Thiem y su derecha demoledora. Además, su drive seguía sin funcionar, no hacía daño. Nadal acabó el duelo con 12 winners y 19 errores no forzados.

“Ganar a Nadal en polvo es de las cosas más difíciles que hay en el deporte. Es muy especial, es increíble, ganarle en su país, en esta pista que es como el salón de su casa. Sólo puedo estar feliz”, comentó Thiem tras cerrar el partido con un winner de derecha.

“Para ganar a Nadal tienes que hacer cosas especiales. Tenía que ir a por los tiros, buscar líneas. Y todo funcionó. Para ganar a Nadal en arcilla tienes que tener un día especial. Todo tiene que funcionar bien”, agregó tras la hora y 56 minutos de encuentro.