12 septiembre,2017 7:50 am

Hay visibles fracturas y grietas en dos primarias de Chilpancingo en las que suspendieron clases

Foto; Jesús Eduardo Guerrero

Hay visibles fracturas y grietas en dos primarias de Chilpancingo en las que suspendieron clases

Las afectadas son la Siervo de la Nación de la colonia Indeco y la Nicolás Bravo de la colonia Obrera. Desde hace más de tres años pidieron a las autoridades la reconstrucción de las instalaciones que resultaron afectadas, porque ya estaban deterioradas, informan maestros

Alina Navarrete Fernández
Chilpancingo

El sismo de 8.2 grados que ocurrió el jueves dejó grietas de 45 grados y fracturas en columnas de dos primarias de esta ciudad en las que se suspendieron clases para más de mil estudiantes, “hasta nuevo aviso”.

Las primarias afectadas son la Siervo de la Nación de la colonia Indeco y la Nicolás Bravo de la colonia Obrera, según maestros de ambas instituciones desde hace más de tres años pidieron a las autoridades la reconstrucción de las instalaciones que resultaron afectadas, porque ya estaban deterioradas.

La primaria Siervo de la Nación está a unos metros del centro de salud de la colonia Indeco, cerca de las instalaciones pasan dos urvans del transporte público, una que va directamente a esa zona y otra que va a la Ruta Oriente.

El plantel ocupa una manzana completa, cuenta con seis edificios de una planta, una cancha de básquetbol y otra de futbol. También tiene áreas verdes. La matrícula de la primaria es de 352 alumnos mientras que la plantilla laboral es 26 trabajadores, maestros frente a grupo, de educación física, inglés, aula de medios, médico escolar, intendentes y administrativos.

En las instalaciones el director Enrique Ángel García dijo que las afectaciones en la escuela fueron principalmente en un edificio que se construyó hace 15 años, aunque la escuela se creó en 1981, pese a ser uno de “los más recientes”.

El edificio afectado tiene tres salones, de primero, cuarto y sexto año que suman un total de 80 alumnos y la Dirección.

Ángel García mostró las grietas que se formaron en las paredes de las instalaciones a consecuencia del temblor, la mayoría son de 45 grados, inclinación que Protección Civil considera una de las más peligrosas, ya que aumentan el riesgo de derrumbe.

Ángel García dijo que desde que es director hace 4 años, solicitó a las autoridades la reconstrucción del edificio agrietado mediante oficios, pero fue después del temblor del jueves que se determinó la suspensión indefinida de labores para revisar las instalaciones.

Contó que el viernes y el sábado personal de Protección Civil y del Instituto Guerrerense para la Infraestructura Física Educativa (IGIFE) acudió a revisar las instalaciones afectadas, ambas dependencias determinaron que el edificio con grietas era inhabitable, luego se suspendieron las clases de manera indefinida, pues aún se espera que dependencias federales analicen la situación.

“Año tras año se reporta a las autoridades el peligro con el que cuenta el edificio, el temblor hizo más visibles los daño”, informó.

Dijo que como director prefirió tomar las precauciones necesarias para evitar accidentes, pues “a veces uno como adulto genera un caos ante un sismo, en horario escolar y con los niños es un riesgo muy latente, prefiero tomar las medidas precautorias”.

Precisó que pese a su amplio terreno, la escuela no cuenta con un área de Servicio Médico, aunque sí hay un doctor, cooperativa, conserjería y baños, por lo que espera que con la revisión a las instalaciones, éstas se puedan ampliar.

La Nicolás Bravo

Por otra parte la primaria Nicolás Bravo está ubicada en la parte baja de la colonia Obrera, a unos metros del bulevar Vicente Guerrero, colinda con un jardín de niños en donde ayer hubo clases de manera normal.

El terreno de la primara es amplio, cuenta con dos edificios de dos plantas, tres salones, área de Dirección y Servicio Médico.
Durante una visita a las instalaciones los maestros informaron que los directores de los turnos matutino y vespertino estaban haciendo trámites para solicitar la reconstrucción de los salones dañados, ya que aunque el viernes y el sábado personal de Protección Civil e IGIFE acudió al plantel, ayer en la mañana no se presentó nadie más a revisar los daños.

En un recorrido por las instalaciones que tienen 53 años de antigüedad, se observaron grietas y huecos en los techos que dejaron al descubierto las varillas, además algunas rejas se doblaron.
El profesor del tercero B, Félix Morales Guerrero dijo que el salón que le corresponde a su grupo es uno de los más afectados, por lo que sus 31 alumnos al igual que los otros 644 que hay en el turno matutino están en riesgo y fue necesaria la suspensión de clases, hasta nuevo aviso.

Afuera el salón del tercero B aún conserva el concreto y polvo que se desprendió de sus paredes con el temblor del jueves, mientras que por dentro las grietas son evidentes, se suman a fracturas en las columnas, según Morales Guerrero.

En las dos escuelas había carteles en las que se informaba a los padres de familia sobre la suspensión indefinida de clases, “por disposición estatal”, también se les pidió estar atentos, ya que el miércoles podría haber nuevas indicaciones.

En la primaria Nicolás Bravo los maestros también colocaron una copia de un mensaje que el gobernador Héctor Astudillo Flores publicó en su cuenta oficial de Twitter la madrugada del viernes, en el que informó que dio instrucciones al titular de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), José Luis González de la Vega Otero, para suspender clases y revisar las escuelas.

Pese a los avisos, algunos padres de familia, en especial en el turno vespertino de la primaria Nicolás Bravo, acudieron con sus hijos, pues desconocían de la suspensión de clases.

Por otra parte según los maestros algunos padres se comunicaron vía telefónica para informar que no llevarían a sus hijos, pues supieron de la suspensión indefinida mediante redes sociales.