Es el mayor asalto de Trump a las poblaciones más vulnerables del mundo que vienen a EU, legalmente, en busca de una vida mejor, advierte el congresista Joaquín Castro. Sorprende la aceptación de México. Llevarían el caso a las cortes.
Washington, 20 de diciembre de 2018. El Partido Demócrata condenó hoy jueves al gobierno del presidente Donald Trump por la decisión de enviar a migrantes de terceros países a México, mientras se procesa su solicitud de asilo en Estados Unidos.
Próximos a tomar el control de la Cámara baja a partir de enero, los demócratas calificaron como cruel el que EU obligue a los solicitantes de asilo a esperar en México el resultado de su solicitud e incluso se mostraron sorprendidos por la decisión del gobierno Mexicano de aceptarlo.
“Este es el mayor asalto hasta la fecha de esta administración a las poblaciones más vulnerables del mundo que vienen a Estados Unidos, legalmente, y en busca de una vida mejor”, dijo el congresista demócrata Joaquín Castro, presidente electo de la bancada hispana demócrata.
“La decisión de hacer que los migrantes esperen en México mientras procesan las solicitudes de asilo sólo continúa con las crueles políticas de esta administración”, agregó.
Congresista por Texas, Castro dijo que muchas preguntas sobre cómo será implementada esta nueva política continúan sin respuesta y que incluso ya está en contacto con la Embajada de México para entender el papel del gobierno de Andrés Manuel López Obrador en esta nueva política.
“La historia no se verá favorablemente en el anuncio de hoy”, añadió el congresista Castro.
Al mismo tiempo, el próximo presidente del Comité de Seguridad Interna de la Cámara Baja, el congresista demócrata Bennie Thompson advirtió a la secretaria de Seguridad Interna, Kirstjen Nielsen, -encargada de implementar la política- de que esta podría ser cuestionada ante las cortes.
“El anuncio (del jueves) amenaza con poner a los migrantes en mayor peligro. Al igual que con muchas de las políticas recientes contra la inmigración de la administración, esto puede, y debe, ser detenido por nuestros tribunales”, apuntó el congresista Thompson originario de Mississippi.
Calificada como una decisión unilateral tomada por el gobierno de Trump, la decisión obligarÌa a los solicitantes de asilo en la frontera a esperar en México la decisión sobre su proceso, algo que tradicionalmente ocurría siendo liberados dentro de territorio estadunidense.
En una comparecencia de Nielsen en la Cámara baja, el demócrata Luis Gutiérrez, -considerado uno de los funcionarios a favor de los migrantes próximo a jubilarse en enero- castigó duramente a la funcionaria por decidir implementar la espera en territorio mexicano.
“Es una vergüenza para todos aquellos que separan los niños y les permite permanecer al otro lado de la frontera por temor a la muerte, por temor a la enfermedad”, comentó Gutiérrez.
En el otro lado del espectro político, el Partido Republicano felicitó a la secretaria Nielsen por lo que llamó “un acuerdo con México” -a pesar de que el gobierno mexicano lo califica como una decisión unilateral de EU- asegurando que esto permitirá mantener la integridad del sistema de asilo de EU.
“Este acuerdo…desalentará a las personas a realizar el peligroso viaje a nuestra frontera suroeste”, aseguró el aún presidente del Comité Judicial de la Cámara Baja de EU, Bob Goodlatte.
“(Esto debido) a la creencia (de los migrantes) que se les permitirá automáticamente ingresar al país (EU) y que se les dará autorización para trabajar y se les permitirá permanecer aquí durante todo el proceso de adjudicación de asilo, que a menudo toma años”, dijo Goodlatte.
Desde la semana pasada, altos integrantes del liderazgo republicano en la Cámara alta, como John Cornyn, había asegurado que el alcanzar algún tipo de acuerdo con México para mantener a los solicitantes de asilo en su territorio representarÌa un momento histórico en la relación bilateral entre los países.
Cornyn había adelantado la semana pasada una felicitación a la secretaria Nielsen por su intervención ante el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador; tanto Cornyn como Nielsen viajaron el 1 de diciembre a la toma de posesión del Mandatario mexicano en la Ciudad de México.
Texto: Mario Alberto Rivera Gaona / Agencia Reforma
Foto: Twitter @uscapitol
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