7 marzo,2019 6:12 am

Pide el papa Francisco a feligreses de Guerrero no permitir que se instale la cultura de la muerte

Envía el mensaje con el obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa quien estuvo hace una semana en El Vaticano. Revela Salvador Rangel que se reunió hace un mes con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
Chilpancingo, Guerrero, 7 de marzo de 2019. El Papa Francisco pidió al obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, en su visita que realizó la semana pasada, que recomiende a los feligreses que impidan que se instale la cultura de la muerte y la violencia en Guerrero.
El prelado reveló también que hace un mes fue citado en Palacio Nacional por la Secretaría de Gobernación para que informara de la situación de violencia que se vive en su diócesis, y dijo que planteó proyectos de desarrollo a la secretaria Olga Sánchez Cordero para disminuir el índice delictivo en algunas zonas del estado.
En declaraciones ayer a los medios de comunicación, Rangel Mendoza calificó, asimismo, como “mediático” el emplazamiento de 30 días que dio la Policía Comunitaria de Heliodoro Castillo a los gobiernos federal y estatal para que detengan a los líderes del grupo delictivo del Cartel del Sur y resuelvan el problema de la violencia en la capital, o de lo contrario harán una incursión armada.
La mañana de ayer miércoles el obispo Rangel Mendoza encabezó, junto con el vocero de la diócesis, el padre Benito Cuenca, una misa en la catedral de la Asunción de María de la capital, en la que colocó ceniza a los feligreses, por la conmemoración de la fecha que da inicio a la Semana Santa, y al final hizo declaraciones a los medios de comunicación.
Dijo que el mensaje en esta Semana Santa a los cristianos y a los ciudadanos en general es a vivir en unidad: “Cristo nos pidió antes de morir, sobre todo, ver la generosidad, él siendo inocente se entregó por nosotros los culpables. En una palabra Dios quiera que en este periodo Guerrero, y particularmente Chilpancingo y Chilapa, Iguala y en Taxco, podamos vivir un tiempo de armonía y de paz, de concordia y, sobre todo, respetando la vida de los demás”.
Informó que durante su visita la semana pasada al Papa Francisco, le habló de la violencia que se está viviendo en México y, particularmente en Guerrero. “Yo le dije claro que nosotros como sacerdotes, como catequistas, estamos con las personas, que no hemos salido de esos lugares de conflicto, que allí está la fe y la religión como un consuelo para todas esas personas”.
Agregó que le explicó al Papa que Guerrero es uno de los estados más violentos, sobre todo por la cuestión de los desaparecidos y los asesinatos, “y el Papa simplemente me dijo: ‘hay que luchar porque no vaya adelante esta industria de la muerte’, ese fue el mensaje básico que me dio, que debemos tenerle más amor y respeto a la vida”.
Rangel Mendoza añadió que le pidió que rezara por los mexicanos y los guerrerenses, por México, “que rezara por Guerrero y por la diócesis, y fue cuando me dijo básicamente tres cosas: ‘dígale al pueblo mexicano que lo quiero mucho, que estoy con ellos y que no dejen que se instale la cultura de la muerte, de la violencia’”.
Informó que la reunión que tuvo con el Sumo Pontífice fue el miércoles 27 de febrero y que en su estancia en Roma celebró (Salvador Rangel) la misa en la basílica mayor sobre el sepulcro de San Francisco de Asís, y que cuando fue presentado por un obispo, éste pidió por los hermanos del pueblo mexicano, porque dijo que allá saben el problema de violencia que se está viviendo aquí. Informó que la intención de esa misa fue por la paz, la concordia y la tolerancia en México.
Dijo que en Roma también se dan cuenta de su trabajo pastoral a favor de la paz y en contra de la violencia, “yo fui a visitar las congregaciones y por lo menos en dos me preguntaron que si continuaba yo con el diálogo con los jefes del narcotráfico y les dije que sí”.
La reunión con Sánchez Cordero
El obispo Rangel Mendoza informó que, asimismo, hace un mes fue citado al Palacio Nacional por la secretaría de Gobernación para que informara de la situación de violencia que se vive en su diócesis.
Agregó que lo llamaron para que conocieran de él la situación de inseguridad que se está viviendo en esta zona, “y, sobre todo, para hacer un proyecto de desarrollo, porque yo siempre he dicho que ahora que bajó el precio de la amapola, la gente no tiene de qué vivir y hasta los mismos jefes del narcotráfico están desanimados, porque no saben a qué se van a dedicar”.
Aunque en seguida aclaró: “sí se dedican a otra cosa, a la extorsión, al robo, al cobro de piso, a los asesinatos, pero ya la goma de opio no es negocio”.
Rangel Mendoza añadió que en esa reunión con Gobernación le dijeron que a nivel nacional se está elaborando un plan de desarrollo y de ayuda sobre todo para la Sierra y en la Montaña.
Con respecto a los desplazados de las comunidades de Leonardo Bravo (Chichihualco) y de Tlaltempanapa, municipio de Zitlala que ya cumplieron más de tres semanas en plantón afuera del Palacio Nacional en demanda de una audiencia con el presidenta Andrés Manuel López Obrador, dijo que lamentablemente han sido tratados con indolencia.
“Desgraciadamente tenemos además de estos desplazados, a los Teloloapan, Apaxtla y, Copalillo, yo no estoy ni con un grupo ni con otro, estoy con la justicia y con los derechos humanos, porque cada quien tiene derecho a tener una casa y que se le respete su lugar, sus animalitos o lo que tenga”.
Añadió que despojarlos de su patrimonio que han hecho con tanto sacrificio durante muchos años, “para mí es una verdadera injusticia”, y luego denunció que los gobiernos estatal y federal los han tratado con indolencia.
Declaró que cuando se reunió con la secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, hace un mes, le explicó la situación que están viviendo los desplazados “y le pedí directamente a la secretaria que trataran de solucionar de alguna manera pacífica esta situación”, pero se ve que hasta ahorita ha habido más bien, indolencia y desinterés, “pero tanto se cacaraquea la Guardia Nacional que ojalá estos vengan a poner orden aquí”.
A pregunta con respecto al emplazamiento que hizo la coordinación de la Policía Comunitaria de Heliodoro Castillo, en el sentido de que si los gobiernos estatal y federal no detienen a los líderes del grupo delictivo del Cartel del Sur y no resuelven el problema de la violencia en la capital, incursionarán ellos a poner orden, el prelado dijo que seguramente se trata de una declaración “mediática”.
“Se han escuchado declaraciones de gente de la Sierra, yo pienso que, más bien, es una declaración mediática. Yo pienso que el gobierno y Chilpancingo y Chichihualco no están con las manos cruzadas, tienen que defender a la ciudadanía”.
Texto: Zacarías Cervantes / Foto: El Sur