La falta de coordinación entre el INBAL y los estados propició que las plicas fueran abiertas antes de los fallos, violando así el anonimato que da garantía a cada concurso, motivo por el cual Cristina Rascón renunció a su puesto.
Ciudad de México, 31 de mayo de 2019. En su estreno, la plataforma digital de envío de manuscritos que el INBAL implantó para sus certámenes literarios fue una de las causas de que cuatro de ellos presentaran irregularidades.
Contrario a los procesos que se habían llevado a cabo en las ediciones anteriores, la colaboración entre el INBAL y las sedes estatales de cada premio cambió este año, al modificarse los lineamientos de recepción de los trabajos y de las plicas de identificación de sus autores.
La falta de coordinación entre la dependencia y los estados propició que las plicas, que son los documentos que vinculan a un escritor con su seudónimo, fueran abiertas antes de los fallos, violando así el anonimato que da garantía a cada concurso.
Según informó el INBAL, se incurrió en la apertura de plicas en los Premios Bellas Artes de Cuento Infantil Juan de la Cabada, de Novela José Rubén Romero, de Literatura en Lenguas Indígenas y de Cuento San Luis Potosí Amparo Dávila.
Tras la filtración vía correo electrónico de un documento que relaciona a 42 autores participantes al premio de novela José Rubén Romero con el título de sus obras, sus seudónimos y una semblanza de su carrera, la escritora Cristina Rascón renunció a su puesto como coordinadora Nacional de Literatura (CNL) del INBAL.
La Secretaría de Cultura de Michoacán, sede del premio, sin embargo, asegura que todo se debió a un error de procedimientos y no a un intento de fraude.
“Fue una falta de claridad en cuanto a las instrucciones y directrices, efectivamente, para evitar este tipo de inconvenientes”, lamentó en entrevista Claudio Méndez, secretario de Cultura de Michoacán.
Con el nuevo proceso que se puso en marcha este año, los participantes envían su manuscrito por medio de una plataforma, únicamente con un seudónimo y datos básicos como su edad y lugar de residencia; después, reciben un comprobante de envío, el formato de la plica -que debe llenarse a mano- y la etiqueta que debe llevar el sobre que la contiene.
La plica, con el sobre rotulado, se envía entonces a la sede de cada premio -en el caso de los que tuvieron irregularidades, Michoacán, Campeche, San Luis Potosí y Oaxaca-, donde tendría que resguardarse inalterada hasta el fallo.
Según explica Méndez, no obstante, la dependencia que encabeza abrió las plicas porque la Coordinación Nacional de Literatura del INBAL le pidió información de los participantes que no se encontraba contenida en la etiqueta del sobre.
“Se nos solicitó información que no venía en el exterior de los sobres, por lo tanto se tuvo que abrir los sobres para el llenado de los formatos que nos estaba solicitando directamente la Coordinación Nacional de Literatura”, declara Méndez.
Entre la información solicitada, expuso el funcionario, estaba la fecha de registro en la plataforma digital para el envío de manuscritos.
El diario Reforma envió un documento en blanco al Premio Bellas Artes de Novela José Rubén Romero, con un seudónimo, y se recibió la etiqueta para el sobre y el formato de la plica.
En la etiqueta únicamente se muestra el folio del participante, su seudónimo y el título de la novela; dentro del sobre, efectivamente, sí se encuentra la fecha de registro en la plataforma en línea como parte de la información de la plica.
“Tiene que ver con un tema de implementación de un proceso”, concluye Méndez.
Para la escritora Raquel Castro, quien trabajó en la CNL de 2006 a 2012, como jefa del Departamento de Promoción y Relación con los Autores, que se encarga de los premios, todo se debió a un error en el nuevo proceso.
“Creo que el problema que hubo ahora es que se recibieron los trabajos por vía electrónica, pero las plicas se siguieron mandando por correo tradicional, con un sobre físico que adentro tenía la información a los estados”, expone en entrevista.
Castro, quien ayudó a implementar el proceso que se seguía anteriormente con los estados, no obstante, opina que la implementación de la plataforma fue una buena idea que no se ejecutó como debía.
“A mí me parece una gran idea desde el punto de vista ecológico y económico. En los premios con los textos más extensos, los participantes podían estarse gastando mil pesos nada más en impresión, engargolado y envío”.
“Lamento muchísimo que se estrene con esta situación. Yo estoy segurísima de que no es una situación de dolo”, reflexiona.
Para la escritora María Rivera, quien también recibió por correo electrónico el documento que delataba la apertura de plicas en el premio de novela, el caso es grave y vulnera la confianza en los premios, pero tampoco se trata de un intento de hacer trampa.
“Estoy convencida de que esto es un fenómeno completamente nuevo, irregular y extraordinario. Las plicas se depositaban exclusivamente en las notarías y sólo se abre la del ganador”, expresa.
“Yo creo que pudo haber estado motivado porque se implementó, como algo nuevo, la plataforma electrónica, entonces yo creo que es una confusión en esta intención de hacer cambios; no se hizo de la manera correcta”, abundó.
Este diario buscó al INBAL para inquirir sobre los errores en la implementación de la plataforma digital, pero la dependencia no emitió ninguna respuesta.
En un comunicado previo, sin embargo, aseguró que las plicas sólo fueron abiertas en cuatro de los diez concursos vigentes que las requieren y que, en coordinación con los estados, las convocatorias de los premios vulnerados serían restituidas y ayer se relanzaron.
La falta de rigor en los procesos, no obstante, ya ha causado mella en los proyectos literarios de los autores.
“Bellas Artes tiene, o tenía, un prestigio de que era más serio, y me gustó que lo podías (el libro) mandar por Internet y la plica debía de ser física, el problema es que, ¿ahora qué hago?”, reclamó la novelista Maribel Vázquez, cuyo seudónimo y título de la obra fue divulgado en el documento.
“Que te pongan en evidencia así es horrible”, lamenta. “De alguna manera te vetan la entrada a cualquier concurso porque te volviste pública sin publicar”.
Como parte importante de su práctica literaria, explica, está el de titular sus obras al final de la escritura, por lo que descarta por completo cambiar de nombre a su novela para hacerla elegible para otro concurso. Ahora buscará publicarla fuera de los certámenes.
Por lo pronto, el INBAL aseguró que, de ahora en adelante, todas las plicas serán resguardadas de forma inmediata ante un notario. El daño a 42 autores, no obstante, cuyos seudónimos y títulos ya fueron divulgados, es ya irremediable.
Definen coedición de Premios INBAL
Este viernes se dieron a conocer los resultados de la convocatoria de Coedición de los Premios Bellas Artes de Literatura 2019.
Lo anterior se dio ante actual polémica tras haberse revelado que en 4 de los 16 certámenes se presentó irregularidad al ser abiertas las plicas de los participantes antes de todo fallo, violando así el anonimato de los concursos.
El caso, resultado de un fallo en la plataforma de recepción de los aplicantes, provocó la salida de Cristina Rascón de la dirección de la Coordinación de Literatura (CNL) del INBA y el relanzamiento de los procesos.
Pese a ello, la polémica no desaparece, ahora a quienes resulten ganadores de diez de los premios se les dará sólo 25 mil pesos, sin IVA; una cifra lejana a los costos de producción de un tiraje promedio.
“Hoy, salió la convocatoria para coeditar con el INBA (.@literaturainba .@bellasartesinba) ofrece 20 o 30 mil pesos, por libro de aproximadamente 100 páginas. ¿Tendrá alguna idea de cuánto cuesta imprimir un libro?”, tuiteó entonces Cuadrivio.
A lo que Rascón, entonces aún titular de la CNL, respondió: “El monto no es para cubrir toda la edición, sino para coeditar, la repartición del tiraje es proporcional a lo aportado por cada coeditor”.
“Es decir, las editoriales pagarán los libros del INBA. ¿O cómo es?”, reviró Cuadrivio.
El fallo de ayer se inclinó por las editoriales Abismos, Almadía, Lectorum, Narratio Aspectabilis, Paraíso Perdido, Paso de Gato, Pluralia, Rhythm & Book, Selector y El Tapiz del Unicornio, para editar, respectivamente, los premios Buzón Penitenciario, de Crónica Literaria Carlos Montemayor, Juan Rulfo para Primera Novela, de Cuento Infantil Juan de la Cabada, San Luis Potosí de Cuento Amparo Dávila, Baja California de Dramaturgia Luisa Josefina Hernández, de Literatura en Lenguas Indígenas, de Minificción Edmundo Valadés, de Novela José Rubén Romero y de Ensayo Literario José Revueltas.
En el acta, se declaró desierta la coedición para el Premio Bellas Artes de Obra de Teatro Para Niñas, Niños y Jóvenes Perla Szuchmacher, y el jurado sugirió abrir una nueva convocatoria.
Texto: Francisco Morales V. / Agencia Reforma / Foto: Agencia Reforma
Entérate más
https://suracapulco.mx/2019/05/30/renuncia-cristina-rascon-a-coordinacion-inbal-por-irregularidades-en-cuatro-concursos-literarios/
