9 junio,2020 11:15 am

Relatan familiares travesías y carencias de pacientes en hospitales de la capital

jnt-familiares-pacientes-ISSSTE-espera.jpg: Chilpancingo, Guerrero 08 de junio del 2020// Familiares de pacientes de la clínica del ISSSTE, esperan afuera de la sala de Urgencias, noticias sobre su familiar, por las medidas de prevención del coronavirus. Foto: Jessica Torres Barrera

En la sala de espera de la clínica del ISSSTE, de lo que antes era Urgencias Médicas y ahora es el acceso al área crítica de Covid-19, varias personas aguardan noticias de sus enfermos. Se observan dos casas de campaña, instaladas para pasar la noche, pues el espacio está casi a la intemperie, sin paredes

Chilpancingo, Guerrero, 9 de junio de 2020. Un profesor con sospecha de haber adquirido Covid-19 manejó y viajó solo la noche del domingo, desde Chilapa a la clínica del ISSSTE en Chilpancingo, en busca de atención médica; y un taxista de la ruta Ocotito-Chilpancingo ingresó al mismo nosocomio, después de que le negaron el acceso en hospitales privados y en el militar regional, señalaron familiares de los pacientes.

En la sala de espera, de lo que antes era Urgencias Médicas y ahora es el acceso al área crítica de Covid-19, varias personas aguardan noticias de sus enfermos; incluso se observan dos casas campaña, instaladas para pasar la noche, pues el espacio está casi a la intemperie, sin paredes.

Familiares de pacientes de la clínica del ISSSTE esperan afuera de la sala de Urgencias noticias de sus familiares. En la gráfica una de las casas de acampar que usan para protegerse de la lluvia y en la noche

Dos hijas del taxista aclararon que no querían ir al ISSSTE debido a la versión de que los enfermos ingresan a esta clínica o al hospital general de Chilpancingo, por cualquier urgencia, luego de un tiempo reciben la noticia de que el paciente murió por el nuevo coronavirus.

Su papá, de 62 años, ya tuvo problemas de oxigenación desde el domingo y lo llevaron a la clínica de El Ocotito, luego a Tierra Colorada, y ayer por la mañana a la capital, al hospital militar regional, y ninguno lo recibió. Los turnaron al ISSSTE, a donde llegó a punto de un paro respiratorio, les dijeron los médicos.

Indicaron que su papá comenzó con dolor de huesos y fiebre baja, de 37 centígrados, el 3 de junio, que lo revisó un médico particular. El domingo fue con otro doctor, a un consultorio privado, porque se le quitó el apetito, comenzó a tener dificultades para respirar y tos, cuando se le resecaba la garganta al respirar por la boca. En los últimos estudios que le aplicaron, de manera particular, se indicaba que tenía las plaquetas bajas y fiebre tifoidea. Ahora, esperan el resultado de la prueba Covid-19, en tres días.

Por otro lado, un doctor de Chilapa pudo haberse contagiado en la atención de pacientes en consultas privadas. De acuerdo con su hijo, el médico tomaba precauciones para evitar la propagación de contagios, porque la mayoría de los pobladores de la cabecera municipal no atendían las recomendaciones de sana distancia y uso de cubrebocas.

Aclaró que su papá se aisló con los primeros síntomas de enfermedad: fiebre, un poco de tos y dolor de cabeza. También se hizo un análisis de plaquetas, porque los malestares eran similares al dengue, y sí estaban bajas. Estimó que podría ser un contagio por mosquito.

Añadió que el miércoles o jueves de la semana pasada, también se hizo en Chilapa la prueba de Covid-19, por parte del sector salud, y los resultados se los entregarían en 10 o 15 días.

Sin embargo, el médico volvió a revisar sus plaquetas y estaban normales. Con una radiografía de tórax se dio cuenta de que sus pulmones estaban manchados, y en ese momento decidió pedir atención en la clínica de Chilpancingo, donde seguía este domingo, esperando los resultados de los estudios de coronavirus.

Por otro lado, el papá de un profesor de Chilapa indicó que su hijo, de 35 años, condujo solo desde Chilapa a la capital del estado, por la noche, debido a que tenía dolores insoportables y desde el viernes no tomaba alimentos, sólo líquidos.

Aclaró que ya había pedido una atención en la clínica, hace diez u ocho días, y lo regresaron a su casa con cuidados en aislamiento. Ahora le realizaron una prueba de Covid-19 y esperan los resultados, aunque podría ser dado de alta en dos o tres días, porque se encuentra estable.

En la sala de espera, otra joven de Chilpancingo espera noticias de su tío, de 79 años de edad, quien ingresó hace ocho días por neumonía. Aclaró que se le practicó una prueba de Covid y resultó negativo.

En este recorrido, dos hermanos comentaron el caso de su mamá, internada desde el sábado por hemorragia de colón. Explicaron que hace año y medio padeció la misma complicación. Hoy, destacaron la mala atención, porque los pacientes están aislados entre sí, en el área general. Señalaron que la escasez de medicamentos es la misma de siempre. Denunciaron que por la pandemia, los precios de las medicinas se incrementaron. Un medicamento que el año pasado adquirían en 350 o 325 pesos, ahora lo compraron en 685.

Texto: Lourdes Chávez / Fotos: Jessica Torres Barrera