La alcaldesa se ampara en el comunicado de la Conagua, donde se afirma que no hay evidencia y agrega que se busca dañar la imagen del puerto, el trabajo del gobierno municipal y a su persona
Acapulco, Guerrero, 29 de agosto de 2020. La alcaldesa, Adela Román Ocampo, negó que haya aguas residuales saliendo del canal pluvial que desemboca a un lado del hotel Krystal Beach y aseguró que la denuncia de dichos escurrimientos son parte de “intereses oscuros que pretenden dañar la imagen del puerto, el trabajo del gobierno municipal y probablemente afectar mediáticamente a su servidora”.
Román Ocampo recordó que la Conagua emitió un comunicado en el que informó que no se encontraron características en el escurrimiento para iniciar procedimientos por descargas de aguas residuales.
El pasado miércoles se difundió una foto en redes sociales en las que veía una gran descarga de agua a la bahía a través del canal pluvial, las cuales supuestamente eran residuales por el color negro que se veía en la desembocadura del mismo. La Comisión Nacional del Agua, Conagua, determinó que no se encontró evidencia para iniciar procedimientos de infracción contra la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco, CAPAMA, por descarga de aguas residuales.
El 14 de agosto, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, pidió al secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Román Meyer Falcón, que se reuniera con el gobernador, Héctor Astudillo Flores, y la alcaldesa, Adela Román Ocampo, para elaborar un proyecto para resolver la falta de agua potable y el saneamiento en la bahía.
En conferencia de prensa en un salón del hotel Krystal Beach, acompañada del secretario general, Ernesto Manzano Rodríguez, y el encargado de despacho de la CAPAMA, José Ramón Aysa Neme, Adela Román dijo que no hay derrames de aguas residuales en el canal pluvial que desemboca a la bahía, y se refirió al informe de la Conagua respecto a que no encontró características de escurrimientos de drenaje.
Explicó que las los escurrimientos del agua de lluvia al mezclarse con la estancada en los canales dio el color oscuro que salió hacia el mar. Aunque admitió que debido a la infraestructura dañada de la ciudad cuando llueve se presentan escurrimientos que se combinan con los desagües que no tienen la capacidad para desalojar el líquido, por eso han iniciado el desazolve de los colectores del drenaje.
Adela Román consideró que debido al informe de la Conagua, “hace suponer un probable montaje de imágenes de parte de intereses oscuros” para dañar la imagen del puerto, el trabajo del gobierno municipal y a ella mediáticamente como presidenta municipal.
Reiteró que cada vez que hay periodo vacacional se publican fotos similares, por eso llama a todos a “cuidar la casa” y pidió al área de Comunicación hacer algo para revertir la “perversidad de algunos que le hacen mucho daño a Acapulco”.
A pregunta de cuáles intereses oscuros, la alcaldesa insistió en que encontró a Acapulco en “brazos de la delincuencia y casi no se decía nada, todo mundo callaba y solapaba” y se ha reducido el índice delictivo desde que llegó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“No me voy a poner a pelear con la gente, yo lo que hago es trabajar, esos que siguen intereses oscuros que sigan con su chamba, yo no me voy a desgastar ni me escudo en lo que me heredaron”.
Recalcó que “el bienestar y la imagen de Acapulco debe de estar por encima de intereses y luchas políticas”, y que los gobiernos de la Cuarta Transformación “han atacado muchos intereses que por años lastimaron a la sociedad y que ahora están decididos a detener el avance de estos gobiernos”.
Convocó a restauranteros, hoteleros, prestadores de servicios turísticos y a todos los que aman Acapulco a defenderlo de la “campaña que a todas luces parece orquestada y va dirigida a dañar el puerto más emblemático de México a nivel internacional”.
Román Ocampo manifestó que no es justo que después de meses afectadas por la pandemia se pretenda dañar la actividad turística de esa manera.
Reiteró que la Dirección de Ecología ha iniciado 73 procedimientos contra establecimientos como hoteles, restaurantes, plazas comerciales y personas físicas, que puede ameritar sanción económica o penal por derrame del drenaje, y recordó que hay empresas que deben más de mil millones de pesos por el servicio de agua potable.
Por su parte, el encargado de despacho de la CAPAMA, José Ramón Aysa, presentó un comparativo de las fotografías publicadas en redes sociales y pidió a los medios de comunicación profesionalismo para defender al puerto de manera responsable”, porque se está trabajando para un Acapulco limpio, “que no simule y tire aguas negras”.
También consideró que “hay muchos intereses y cosas de por medio que están frenando el cambio positivo” y recordó que todavía se están analizando las muestras tomadas el pasado miércoles y que “no rechace la posibilidad que pudiera haber algo”, pero se sigue revisando.
Después de la conferencia, la alcaldesa, con los funcionarios municipales, bajaron a la salida del canal pluvial, donde Román Ocampo dijo que lo importante es que “no apesta” el agua a drenaje e incluso hizo referencia a lo dicho por sus acompañantes que se veían peces en el agua que desde la plazoleta se veía de color verde.
Los trabajadores de playa le gritaron a la alcaldesa que se trabajara en eso, en evitar contaminar la playa y no en sacarlos a ellos, otros manifestaron que no iban a hacer nada, comentarios que Román Ocampo ignoró y antes de irse se compró unos huaraches en el parían en esa zona e invitó al consumo local.
También ingenieros que trabajan para la CAPAMA explicaron que el miércoles cuando se dio el escurrimiento vertieron un líquido azul que sirve para desintegrar cualquier residuo fecal.
Texto y foto: Mariana Labastida
