Ciudad de México, 9 de septiembre de 2020. El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no se mete en los asuntos internos de Morena y no tiene un candidato favorito a la dirigencia ya que no es el jefe del partido.
“Como parte de la transformación del País, que es un hecho, una realidad, por primera vez en décadas, el Presidente no es el jefe del partido en el Gobierno, antes el que era Presidente, además de representar al Poder de los Poderes, al Ejecutivo,y subordinar al Poder Judicial y al Poder Legislativo, porque así era, también era el que imponía candidatos, era el jefe del partido, eso ya se terminó, ahora somos respetuosos de la independencia, de la autonomía de los Poderes y no nos metemos en asuntos partidistas”, expresó.
Tras agradecer a quienes ayudaron a fundar al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y que hizo a un lado al régimen corrupto, el Mandatario dijo que estará al margen del proceso de elección y que solo espera que no haya imposiciones.
“No debo meterme en los asuntos internos de Morena y no tengo, desde luego, ni candidata ni candidato preferido, como era antes. ¿Qué espero? Que en todos los partidos haya democracia, que no haya imposiciones, y que sea el pueblo el que decida libremente”.
El Mandatario recordó que uno de sus compromisos es que se respete el voto de los ciudadanos y se acabe con los fraudes electorales.
“Estoy absolutamente convencido de que es perjudicial para el País (que haya fraude electoral). Cuando llega alguien a un cargo mediante un fraude tiene que buscar legitimarse en el poder y para eso son capaces de cualquier cosa”, advirtió.
López Obrador insistió, como lo ha dicho en ocasiones anteriores, que se convertirá en guardián de las libertades del pueblo y estará pendiente de que las elecciones sean libres y limpias.
Que no se use el presupuesto público, dijo, que no se trafique con la probreza de la gente y que se acaben prácticas vergonzosas como el acarreo, el embarazo de urnas, la alteración de actas.
Texto y foto: Agencia Reforma