16 julio,2022 9:41 am

Luego de tres años de retraso, llega la escritora igualteca Zel Cabrera a Canadá, para una residencia artística

 

Acapulco, Guerrero, 16 de julio de 2022. La escritora igualteca Zel Cabrera celebró que actualmente la poesía permita a quien la escribe la posibilidad de explorar diferentes temas, siendo su caso el cabello femenino, tema por el que se decantó en su más reciente poemario y que concluyó de la mano de una residencia artística en Canadá.

En entrevista vía Zoom hasta el Centro Banff para la Creatividad y las Artes de Alberta, recordó que dicha residencia fue obtenida en 2019 a través de una convocatoria del entonces Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca), pero debido a la pandemia de Covid-19 recién en estas semanas se pudo llevar a cabo.

Sobre poemario, comentó que el cabello femenino “siempre ha sido visto como adorno sin importancia, como algo menor; incluso filósofos como Arthur Schopenhauer han dicho que las mujeres somos animales de cabellos largos e ideas cortas”.

Por ello, es que trabajó con el propósito de “desmitificar esta idea vertida en toda la tradición de la poesía, por lo menos en la hispanohablante, donde siempre los hombres poetas se han referido al cabello de las mujeres como un mero adorno y no han profundizado en él”.

Y es que reveló, en una rápida búsqueda en internet se puede dar uno cuenta de que la gran mayoría de los trabajos al respecto del cabello femenino son de hombres que lo contemplan de manera exagerada como un adorno, por lo que la poeta consideró interesante otro punto de vista para trabajar con la poesía.

“Yo creo que todos los temas son pertinentes en la poesía, creo que tenemos que dejar de ver a la poesía como algo canónico, sagrado, intocable, alto; la poesía se debe ocupar de cualquier tema, cualquier cosa, desde el aire que respiramos hasta de una botella de agua.

“El problema de la poesía es que siempre ha sido llevada a aspirar a los grandes temas como la muerte, el amor, la soledad y de pronto tenemos que voltear a vernos a nosotros y vemos, en este caso, que el cabello es una de las cosas que más manipulamos todo el tiempo, que nos preocupa mucho, que dice mucho de nosotros, más de lo que creemos, y entonces es parte de nosotros, de nuestro cuerpo, y que no ha tenido el tratamiento pertinente no nada más en la poesía, sino en la literatura en general”.

Luego de relatar que parecía incierto que se llevara a cabo dicha residencia porque Canadá cerró prácticamente sus fronteras en estos meses al igual que diversos centros de estudios artísticos mientras que sus programas de intercambio se suspendieron, celebró que finalmente pudiera realizarla.

Texto: Óscar Ricardo Muñoz Cano / Foto: Cortesía