Declara luto nacional en conmemoración de las víctimas de la represión. El Congreso otorga la confianza al nuevo primer ministro Alberto Otárola, mientras legisladores de izquierda le gritan asesino. La Fiscalía confirma que investiga por genocidio a la presidenta Dina Boluarte
Madrid / Lima, 11 de enero de 2023. El primer ministro de Perú, Alberto Otárola, anunció ayer un toque de queda de tres días en el departamento de Puno, donde en las últimas 24 horas fallecieron 18 personas a causa de los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad en las protestas antigubernamentales.
La inmovilización social obligatoria tendrá lugar desde las 20.00 horas hasta las 4.00 horas y entrará en vigor próximamente, si bien no trascendió hasta el momento qué día específicamente, informó La República.
El decreto obliga a los ciudadanos de Puno a permanecer en sus domicilios en el horario establecido por el gobierno central, restringiendo además el funcionamiento de algunos negocios.
Asimismo, el Ejecutivo peruano declaró un luto nacional que se aplicará este miércoles 11 de enero y que irá en conmemoración a las víctimas de las protestas.
“Hoy se aprobó en el Consejo de Ministros un decreto supremo que declara la inmovilización social obligatoria en Puno por el plazo de tres días desde las 20.00 horas hasta las 4.00 horas”, mencionó el primer ministro peruano, según el citado diario.
Otálora lamentó las muertes, pero dijo que miles de personas quisieron tomar el aeropuerto de Juliaca en un “ataque organizado y sistemático” contra la Policía, financiado por dinero “oscuro” de la minería ilegal y narcotráfico.
En ese sentido, Otárola deploró la muerte del agente de patrulla, José Luis Soncco Quispe, quien perdió la vida al ser quemado vivo en su coche. “Deploro esta agresión contra las fuerzas del orden”, manifestó.
El primer ministro de Perú anunció estas nuevas medidas durante su presentación en el Congreso andino. El primer ministro asistió junto a su gabinete para explicar las políticas del gobierno de Boluarte y buscar el voto de confianza.
Por su parte, el Congreso de Perú otorgó ayer el voto de confianza al Consejo de Ministros liderado por el recién nombrado primer ministro, Otárola, después de que se presentara durante un pleno marcado por las muertes durante las protestas que están teniendo lugar en el país en contra del gobierno de Boluarte.
Con 73 votos a favor, 42 en contra y seis abstenciones, la cámara legislativa andina mostró su confianza al nuevo gabinete.
Antes de iniciar la intervención del ‘premier’, un gran número de congresistas, sobre todo de bancadas de la izquierda, se acercaron con carteles para gritar “asesino” a Otárola por los hechos ocurridos en Puno, motivo por el que la sesión se llegó a suspender momentáneamente.
El líder del partido Perú Libre, Vladimir Cerrón, también criticó la votación: “Sobre los 47 muertos, se dio la confianza al gabinete de la muerte con 73 votos a favor. Como dice la canción: ¡Que a esos cuantos no lo olviden fácilmente!”.
Horas antes, los legisladores habían considerado que la sesión plenaria debía suspenderse, pero su propuesta obtuvo el respaldo de la mayoría, ya que solo contó con 29 votos a favor.
Durante las últimas 24 horas fallecieron 18 personas durante las protestas en las que se pide la dimisión del gobierno de Dina Boluarte y la convocatoria de elecciones presidenciales.
En la peor jornada de protestas por el número de víctimas, la Defensoría del Pueblo y el gobierno informaron además de 68 civiles y 75 policías heridos en la víspera en Puno, muchos de ellos por balas o perdigones, según las autoridades de salud.
Con los últimos fallecidos, son ya al menos 45 las personas que perdieron la vida desde que estallaron las movilizaciones por el cese del presidente Pedro Castillo, que fue apartado por el Congreso tras intentar arrogarse más poderes con vistas a conformar un gobierno de excepción.
Por otra parte, la Fiscalía de Perú anunció la apertura de una nueva investigación a la presidenta del país, Dina Boluarte, por la muerte de al menos 17 personas en la jornada del lunes en la localidad de Juliaca, en el sur de la nación andina.
En tanto, la portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, Marta Hurtado, mostró preocupación ayer por la violencia durante las protestas en Perú, que se saldaron con 40 muertos y 518 heridos desde el pasado 7 de diciembre.
El expresidente de Bolivia Evo Morales exigió ayer al gobierno de Perú que detenga “la masacre de nuestros hermanos”, tras los enfrentamientos entre civiles y fuerzas de seguridad que dejan 39 muertos en un mes, según información de AFP.
Mientras, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, tachó de “masacre contra la población” la situación que está viviendo Perú, que registró cerca de medio centenar de muertos desde el inicio de las protestas antigubernamentales.
Por su parte, el presidente de Chile, Gabriel Boric, calificó de “inaceptables y dolorosas” las muertes que las autoridades peruanas notificaron en las protestas antigubernamentales del sur del país (Con información de Agencias).
Texto: Europa Press / Agencia Reforma
