Ciudad de México, 15 de octubre de 2023. Tras el asesinato del precandidato Fernando Villavicencio en agosto, los candidatos a la Presidencia de Ecuador, Luisa González y Daniel Noboa, comenzaron a usar chalecos antibalas y son resguardados bajo un fuerte operativo de seguridad.
La incertidumbre y el desencanto con la situación de violencia rondan los comicios de hoy, cuyo ganador tendrá apenas 15 meses para intentar cambiar el complejo panorama del país sudamericano, sumido en una ola de asesinatos y cuya población cada vez opta más por migrar.
De cara la segunda vuelta que se dirimirá en las urnas, Noboa lidera mínimamente la intención de voto, de acuerdo con varias encuestas.
Pero varios expertos destacan que porcentaje de votantes indecisos en Ecuador, que ronda entre el 12 y el 20 por ciento, podría ser el punto que incline la balanza en la elección presidencial.
El tema central de las campañas se centra en la seguridad, principal preocupación de la población ante el inusitado auge de homicidios. Ecuador cerró el 2022 con una tasa de 25.32 muertes violentas por cada 100 mil habitantes, la más alta de los últimos años, según estadísticas oficiales.
La situación cobró mayor relevancia luego del homicidio de Villavicencio, abanderado de la lucha anticorrupción y conocido por sus declaraciones contra las bandas criminales y el narcotráfico, ocurrido a poco más de una semana de las elecciones de primera vuelta.
El presidente Guillermo Lasso tachó el asesinato de “crimen político” y, luego de confirmar que se mantendría la fecha de los comicios, indicó que se implementarían medidas de seguridad adicionales que incluirían un despliegue militar.
Los chalecos antibalas se convirtieron desde entonces en una prenda indispensable en las actividades públicas de los candidatos, quienes también suelen estar acompañados por escoltas y guardaespaldas.
A raíz del asesinato de Villavicencio, Noboa comenzó a usar chaleco antibalas desde la primera vuelta, mientras que González lo implementó durante su campaña de segunda vuelta, después de que se dio a conocer un presunto plan para atentar también contra ella.
Según el Observatorio Ciudadano de Violencia Política, las de 2023 han sido las elecciones más violentas en la historia de Ecuador, con 88 casos de violencia política, entre ellos el asesinato de Villavicencio y del alcalde de la ciudad de Manta, Agustín Intriago.
González y Noboa cerraron el jueves sus campañas electorales con actos multitudinarios que fueron vigilados por la fuerza pública. Ambos encabezaron caravanas y mítines en varias ciudades, aunque siempre rodeados de robustos dispositivos de seguridad.
Sus campañas también han resaltado las políticas de seguridad de sus eventuales gobiernos. Noboa, por ejemplo, prometió invertir en equipo policial, crear un megaprograma de ciberseguridad y fortalecer el sistema de justicia para combatir la sobrepoblación en las cárceles, donde se han registrado varias matanzas en los últimos años.
González, a su vez, indicó que reestructurará el Ministerio del Interior para mejorar los procesos de investigación policial y reducir la impunidad, así como abordar la pobreza y la falta de oportunidades, en aras de combatir las causas subyacentes de la afiliación a grupos criminales.
Las elecciones de hoy también serán históricas debido a que se derivan de la aplicación por primera vez en la historia de la “muerte cruzada”, mecanismo legal que Lasso utilizó en mayo para interrumpir su mandato y así evadir su destitución mediante un juicio político.
Texto y gráfico: Agencia Reforma
