6 noviembre,2023 4:52 am

Da el rockero Billy Idol un show salvaje en el tercer día del festival Hell & Heaven

Agencia Reforma

Toluca

Conectado con el punk británico, rockstar de una pieza que acabó encajando en el new wave y probó las mieles de las listas de popularidad con pop-rock electrónico, con ese bagaje se adueñó Billy Idol del Hell & Heaven 2023, que empezó el viernes pasado y acabó este domingo.
Cuando a las 19:20 horas, minutos antes de su turno, el intérprete de cabello rubio erizado salió a escena, en el Heaven Stage, no hubo tiempo para la ovación: arrancó al instante con Dancing with myself, el clásico de su banda original, Generation X.
Al principio se notó cierto contraste de decibelios y energía con el grupo que acababa de dejar el escenario contiguo, Machine Head. El nivel auditivo había sido superior, digno del mejor metal, pero Idol, de 67 años, no tardó en entrar en calor.
“¡México, Toluca, vamos!”, llegó a decir en cuatro ocasiones en el Centro Dinámico Pegaso, al que acudieron, según organizadores, entre 70 y 80 mil personas.
Cradle of love mantuvo la nave enderezada en busca todavía de más poder.
Con el cantante mencionando varias veces la ciudad sede, introdujo a su guitarrista, Steve Stevens, acompañado por la poderosa línea de bajo de Flesh for fantasy, en una versión extendida que para los fans, seguramente, valió el boleto.
Interpretó The cage, canción inspirada durante el confinamiento por coronavirus, antes de entregar un Eyes without a face, no tan fiel al track de estudio.
El frío empezaba a sentirse en la explanada, abarrotada, pero Idol se despojó de la chamarra de cuero para quedar en playera de manga corta.
En su show, convirtió el lugar en sala de baile masivo con Mony Mony, la que causó más euforia general, mientras el escenario despedía luces púrpura y rosa al compás.
Running from the ghost, tema nuevo, desató toda la potencia de la que es capaz, seguida por Night of the Cadillacs, otro guiño a Generation X y al punk rock de sus inicios.
Mientras Stevens alardeaba de destreza en cada solo de guitarra, Idol emergió del fondo con una solemne Top Gun anthem, que arrancó sonrisas de muchos.
La despedida fue igual de épica que el tema de película, con una seguidilla formada por Rebel yell, para bajar revoluciones con Hot in the city y culminar con la reconocible White wedding.
“Gracias a todos por hacer esto tan jodidamente grandioso, México, los amo”, remató un Billy Idol que volvió a engrandecer su leyenda.
Alguien con quien se puede ir a lo más alto o al mismo infierno si fuera necesario.

Experiencia integral

A 13 años de dar sus primeros pasos, el festival dejó patente que no es imprescindible amar el heavy metal, ni siquiera la música, para divertirse.
Con una larga lista de puestos de comida y bebida, rueda de la fortuna, zona vikinga, locales de artesanías y recuerdos y áreas de esparcimiento, el foro se llenó de adultos y jóvenes, parejas y familias que iban de un lado al otro, descansaban en el pasto o se quedaban en el escenario de su artista incondicional.
Grupos como Rata Blanca, Biohazard y Flogging Molly atraían a la mayoría de la concurrencia en cada escenario, lo cual redundaba en una experiencia total para quiénes buscaban saciar el hambre de bandas de distintas épocas y estilos.
Guns N’ Roses subió al escenario Heaven después de una larga racha de chiflidos de impaciencia de los fans.

Anuncia baterista de Slipknot que deja la banda

Jay Weinberg, baterista de Slipknot, anunció su salida de la banda a tan sólo un día de que se presentaran en el Hell and Heaven Open Air, que celebró su más reciente edición en el Centro Dinámico Pegaso.
Después de una década con la popular banda metalera, tras reemplazar a Joey Jordison, el músico estadunidense de 33 años no ha explicado aún los motivos por los que se retira de la alineación, de la cual ha sido fan desde niño.
“Queremos agradecer a Jay Weinberg su dedicación y pasión durante 10 años. Nadie podrá reemplazar nunca el sonido, el estilo o la energía originales de Joey Jordison, pero Jay hizo honor a Joey y contribuyó a los tres últimos álbumes; nosotros, la banda y los fans se lo agradecemos”, escribió la agrupación formada en 1995 en Des Moines, Iowa, Estados Unidos.
Weinberg, de acuerdo con opiniones de usuarios de redes sociales, supo mantener la identidad sonora de Slipknot, que se caracteriza por su poder en los tambores, ya que congrega a un baterista y dos percusionistas, lo que da solidez a su sonido y eso lo distingue de otras bandas.
“Pero como siempre, Slipknot tiene la intención de seguir evolucionando. La banda ha decidido tomar una decisión creativa y separarse de Jay. Le deseamos a Jay lo mejor y estamos muy emocionados por lo que nos depara el futuro”, agregó la banda.
Precisamente por esto último, entre los fans se han desatado suspicacias, lo que les lleva a pensar que los demás integrantes, Corey Taylor, Jim Root, Mick Thomson, Shawn Crahan y Sid Wilson, tuvieron algún tipo de conflicto con el baterista.
El padre de Jay es Max Weinberg, quien también fue baterista de la legendaria E Street Band, agrupación que actualmente está dando una gira con El Jefe, Bruce Springsteen.
Weinberg grabó tres discos con Slipknot, 5: The Gray Chapter, We are not your kind y The end, so far.

Cierra Muse el segundo día

La banda británica de rock alternativo Muse, cerró el segundo día del Hell and Heaven Open Air, en el Centro Dinámico Pegaso.
Gran variedad de géneros musicales se dieron cita para resonar en los cuatro vientos en el Valle de Toluca la noche del sábado y la madrugada del domingo.
La agrupación, con casi 25 años de trayectoria, tomó el escenario Hell Stage veinte minutos después de lo programado pero con una espectacular apertura inspirada en la canción Will of the people, del álbum que lleva el mismo nombre y que fue lanzado en 2022.
Matt Bellamy, Chris Wolstenholme y Dominic Howard combinaron muy ad hoc su presentación con la temática metalera del festival, apareciendo con máscaras de caballeros a la par de la proyección del video Kill or be killed en los costados del escenario.
Apenas entraron para tomar sus instrumentos y el grupo formado en Teignmouth, rápido conectó con sus fans, quienes corearon temas como Compliance, y por supuesto Supermassive black hole.
La banda es conocida por sus mezclas entre electrónico, hard rock y progresivo, con espectáculos deslumbrantes por lo que el Hell and Heaven no fue la excepción y todo el set fue acompañado por atracciones como columnas de fuego y cañones de serpentinas que fueron lanzadas entre el público.
Entre las primeras canciones del show estuvieron Psycho, Interlude e Hysteria, que dieron paso a una máscara gigante de caballero que se apoderó de todo el escenario, con la misma estética que el grupo apareció en los primeros minutos del espectáculo.