Da la asamblea a los ediles la función de representación ante otras autoridades y acuerda también la revocación de mandato, porque al ser electos en las asambleas, éstas pueden quitarles del cargo
Ñuu’ Savi, Guerrero, 5 de enero de 2023. Este jueves, en asamblea, 33 comisarios del nuevo municipio Ñuu’ Savi acordaron que en el próximo gobierno que se elegirá por usos y costumbres habrá revocación de mandato, que las figuras de representación para cuestiones administrativas ante los gobiernos federal y estatal serán alcalde o alcaldesa, síndico o síndica y regidores o regidoras, pero que serán las comunidades las que decidan la planeación de gobierno y su política, y sus funcionarios los obedezcan.
Ayer se celebró en la cancha de esta cabecera municipal, una asamblea encabezada por el Comité para la Elección, Integración e Instalación del Gobierno Municipal de Ñuu’ Savi, Guerrero, a la que asistieron 32 comisarios y delegados de 36 comunidades, según la lista de asistencia, aunque en el lugar se vio a más de 100 asistentes, para revisar la propuesta de lineamientos.
Todo el encuentro fue en tu’un savi, la lengua de los na’savi. Empezó a las 10 de la mañana y terminó a las 2:40 de la tarde.
A los asistentes se les entregó el borrador de los lineamientos, y se les pidió que si estaban a favor o en contra o si tenían alguna observación que participaran, y fueron constantes las participaciones.
La asamblea decidió que el Ayuntamiento va a conservar el nombre de H. Ayuntamiento Ñuu’ Savi, porque fueron los habitantes de la zona quienes lo propusieron cuando hicieron los trámites para separarse del municipio de Ayutla de los Libres.
Además se acordó que la estructura de gobierno será encabezada por la figura de Cabildo que tendrá regidores, síndico y presidente municipal, porque en la experiencia del gobierno por usos y costumbres de Ayutla, tuvieron muchos problemas en la Casa de los Pueblos, ya que las leyes no reconocen otras figuras que las mencionadas.
Además se aprobó la revocación de mandato porque al ser electas desde las asambleas, éstas pueden quitarles del cargo.
En el proceso aún queda una última asamblea para aceptar las propuestas que será el 8 de enero, también en esta cabecera municipal de Coapinola, se acordó.
Consultado al respecto, el integrante del Comité para la Elección, Melquiades Gregorio Porfirio informó que ese día se presentará la última versión de los lineamientos.
Se le comentó que en las votaciones se observó que fueron casi de mayoría absoluta, y se le preguntó si podrían ser los resultados de la asamblea resolutoria, y respondió que los acuerdos se ven consensuados, que podrían quedar así, pero falta que se entregue la información a sus pueblos y éstos decidan.
En cuanto a lo que falta de este proceso de organización, dijo que los lineamientos acordados en esta asamblea los tiene que ratificar la del 8 de enero, después la Comisión Electoral se va a quedar para revisar cuestiones técnicas, “errores de ortografía y redacción, pero el corpus ya va a estar integrado”.
Después de la validación los resultados se tienen que entregar al Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) el 14 de enero, “estamos en tiempo y forma”.
Explicó que en los lineamientos para elegir al nuevo gobierno hay cinco etapas, la primera es la informativa, la segunda es esparcir la información en cada comunidad, después proponer a los ciudadanos con una mujer y un hombre, después de que se elijan tendrán que ser ratificados en asamblea.
A diferencia de la experiencia de Ayutla ya no habrá la figura de un representante, sino que votarán todos los ciudadanos del municipio en sus respectivas asambleas.
Herederos de una lucha
Consultado después de la asamblea de ayer, Melquiades Gregorio consideró que este ejercicio de democracia directa es necesario e interesante, pero dijo que no es fortuito, sino que viene de las luchas de la gente que antes que él ocupó este territorio.
Reivindicó al dirigente social de la década de 1970, Hilario Ramírez Morales, “llega con una formación marxista, egresado de lo que era la Universidad Pueblo, ve cacicazgos y rompe con esos cacicazgos y hay una formación de líderes en la región”.
“Después se da el movimiento zapatista (el surgimiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en Chiapas el 1 de enero de 1994) con la idea de los municipios autónomos y surgen también varios líderes que están en esa idea, pero esa idea buscaba la autonomía vía armada”.
Reivindicó también a las víctimas de la masacre de El Charco del 7 de junio de 1998 perpetrada por el Ejército, pero ese ataque dejó sin liderazgos a la región, se ocultaron porque fueron perseguidos por las fuerzas militares.
“Recordemos que el Ejército violentó los derechos humanos de todas las formas, el recuerdo que yo tengo de esa época es estar con mi mamá en la cosecha y ver cómo los soldados pisaban la cosecha, otra imagen que tengo es de helicópteros, muchos soldados, me tocó ver en acción al aparato represor de esa época”, añadió.
Se le preguntó si vio alguna ayuda del gobierno y respondió, “vi la fuerza del gobierno, pero sólo la fuerza represiva, mataron a muchos líderes”.
Después llegó una nueva generación de líderes que buscaron una alternativa a la pobreza y la marginación en los partidos políticos, “tampoco funcionó”.
La siguiente generación, ésta que logró la conformación del nuevo municipio, a la que pertenece, “decimos, no hay que seguir el sistema de los partidos políticos, sino retomar nuestros propios sistemas, el cambio está desde nuestros pueblos, y ¿cómo lo podemos hacer?, ejerciendo nuestros derechos. Es lo que estamos haciendo, los pueblos se están apropiando de sus derechos, ejerciéndolos”.
Expuso que uno de los logros de esta lucha ejerciendo sus derechos es el primer gobierno por usos y costumbres de la entidad, en el municipio de Ayutla de los Libres, porque se demostró que un indígena puede detentar el poder, “y así terminando reconociéndolo en Ayutla”.
Logrado eso, siguió, “los pueblos retomaron un viejo sueño, la búsqueda de un municipio propio, autónomo, lo que dicen ahora es ‘sigamos en esa tónica, ejerciendo nuestros derechos’”.
Texto y foto: Rosendo Betancourt Radilla
