Ciudad de México, 5 de agosto 2024.- La directora de escena y dramaturga Perla de la Rosa, galardonada con la Medalla Bellas Artes, dedicó esta presea a la cineasta mixteca Ángeles Cruz e hizo un llamado al presidente de la República para que proteja la vida de la actriz que ha denunciado la violencia en San Miguel El Grande, Oaxaca.
La galardonada también instó a los gobiernos a apostar por el arte, en lugar de promover la militarización.
“Estoy convencida de que las artes, la cultura y el deporte transforman y salvan vidas, crean futuro para los jóvenes: yo soy ejemplo de esa transformación y desde hace décadas y por toda la vida seguiré haciendo votos porque los gobiernos entiendan que la solución de fondo para la inseguridad y las violencias que hoy carcomen nuestro País no está en las armas, las policías y la militarización que han fracasado reiteradamente”, dijo.
Lamentó que en México pierda sentido la vida, que se acumulen los asesinatos y las desapariciones, y se aprecie más el dinero.
“Es aquí donde las artes y el deporte pueden aportar enormemente en la construcción de una sociedad más humana y en paz”, expuso en el Palacio de Bellas Artes, donde le fue conferido el galardón, en una ceremonia encabezada por la directora del INBAL, Lucina Jiménez, quien también reconoció la trayectoria del dramaturgo David Olguín, tutor de la Fundación para las Letras Mexicanas y miembro del consejo artístico del Teatro El Milagro.
De la Rosa agradeció a sus maestros Ernesto Ochoa, Octavio Trías, Héctor Mendoza, Luisa Huertas y Luis de Tavira.
Olguín también expresó un agradecimiento, acompañado del poema Gratitud, del argentino Oliverio Girondo:
“Gracias por la ebriedad / por la vagancia / por el aire / la piel / las alamedas, por el absurdo de hoy / y de mañana / desazón / avidez / calma / alegría / nostalgia / desamor / ceniza / llanto”.
El agradecimiento de Olguín se hizo extensivo a la comunidad que forja el teatro.
“La escritura para la escena es un acto individual, que se ejerce en su ambición más plena, en solitario, pero el teatro es un arte colectivo y sin el acompañamiento de mucha gente, yo no podría estar aquí, delante de ustedes. Por eso quiero repetir en público esta plegaria que decían mis más recientes alumnos antes de dar función: ‘pongo mi mano sobre la tuya para hacer juntos aquello que solo no puedo’.
“David Olguín lleva dentro a mucha gente y la palabra gratitud no le basta. Pero dar algunos agradecimientos me hará irme a casa, y luego a ensayo, con una sensación de mayor ligereza”.
Manifestó su gratitud, entre otros, a la actriz Laura Almela, su compañera de vida, a maestros ausentes como Ludwig Margulles, Juan Tovar y Esther Seligson, entre otros, y presentes, como Rosa María Bianchi, Guillermo Ramírez y Rodrigo Páez.
Texto e imagen: Agencia Reforma
