Después con el nombre de Juan hizo revelaciones sobre los vínculos del grupo criminal con autoridades municipales, estatales y federales incluidos militares de alto rango
Ciudad de México, 7 de septiembre de 2024. La Fiscalía General de la República (FGR) capturó en la Ciudad de México a Gildardo López Astudillo, El Cabo Gil, su testigo “estrella” en el caso Ayotzinapa, con base en una orden de aprehensión por el delito de delincuencia organizada emitida hace ocho años.
Agentes de la Policía Federal Ministerial (PFM) aprehendieron el jueves a las 21:35 horas al presunto miembro de la organización criminal Guerreros Unidos, cuando circulaba en la calle Morelos, a una cuadra de la Penitenciaría de Santa Martha Acatitla.
El testigo protegido con nombre clave Juan fue detenido con base en una orden de aprehensión librada por el Juzgado Noveno de Distrito en Guerrero, por delincuencia organizada, en la modalidad de delitos contra la salud, según la causa penal 7/2016, confirmaron fuentes ministeriales.
Se trata de una orden de captura que la FGR tardó ocho años en ejecutar , pese a que El Gil estuvo en la cárcel y pudo cumpli-mentarla en reclusión
Fue trasladado a los separos de la Subdelegación de la FGR en Tacubaya, y la madrugada del viernes agentes federales lo ingresaron al Penal del Altiplano.
López Astudillo fue detenido en septiembre de de 2015 en Taxco . Se le señala como el responsable de haber ordenado a agentes municipales entregar a los 43 normalisras de Ayotzinapa al grupo criminal Guerreros Unidos para desaparecerlos, la noche del 26 de septiembre de 2014.
En 2019 salió de la cárcel , como consecuencia de la sentencia del Primer Tribunal Colegiado de Tamaulipas, que invalidó decenas de testimonios de im-plicados en estos hechos, bajo el supuesto de que había la sospecha de que habían sido torturados.
Iniciado el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, cuando aún estaba preso, el presunto integrante del grupo criminal que dominaba en Iguala fue trasladado del penal del Altiplano al reclusorio Norte, donde logró al poco tiempo su libertad, y recibió el beneficio de testigo protegido , con el nombre clave de Juan.
Sus declaraciones se consideran clave para que la FGR tratara de reoientar las líneas de investigación del caso Ayotzinapa.
Entre lo dicho por Juan están los señalamientos contra el Ejército y la supuesta narconómina de Guerrero Unidos en las corporaciones de los gobiernos federal, estatal y municipal. Fue ese testigo protegido quien habló de vínculos de militares de alto rango con ese grupo criminal, e incluso mencionó a Omar García Harfuch, entonces jefe de la Policía Federal en Guerrero, ex secretario de Seguridad en la Ciudad de México y actual senador electo y próximo Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno Federal.
En su informe de septiembre de 2023, Caso Ayotzinapa: narrativa de hechos, el gobierno federal lo señala como responsable de ordenar a los policías municipales desaparecer a los normalistas.
La Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (Covaj) tuvo acceso a diversas declaraciones de objetivos prioritarios que participaron en los hechos, entre los cuales se encuentran Sidronio Casarrubias, jefe de Guerrros Unidos, y Ncolás Nájera, El May, jefe de sicarios en Iguala, dice el informe. “Este último señala que ‘el responsable de todo es El Gil, quien le da instrucciones a Valladares (Francisco Salgado Valladares, ex subdirector de la Policía de Iguala) de que se los entregue (a los normalistas de Ayotzinapa) a César Nava, ex jefe de la Policía de Cocula, quien se llevó a cuatro chavos al rancho donde estaba El Gil, que estaba drogado ahí con El Caderas”.
Desde el año pasado, El Gil dejó de presentarse a las diligencias en las que era requerido para declarar contra algunos procesados y luego tramitó un amparo contra una orden de aprehensión, de acuerdo con información publicada por Reforma.
Entre las primeras declaraciones a la FGR del testigo protegido Juan, en 2020 está que policías de Iguala y otros municipios, agentes estatales y militares, repartieron a los 43 normalistas en diferentes grupos, la noche del 26 de septiembre de 2014 y madrugada del 27, y fueron entregados después a Guerreros Unidos. Sicarios de este grupo criminal desaparecieron a los normalistas en diferentes lugares.
Texto:Agencia Reforma y Redacción/Foto: Tomada de Internet