Se manifestaban para evitar que el Instituto de Seguridad Social de la Fuerzas Armadas Mexicanas siga construyendo unidades habitacionales, sin antes indemnizarlos por el terreno que aseguran que no fue pagado al ejido
Acapulco, Guerrero, 25 de septiembre de 2024. Antimotines de la Guardia Nacional desalojaron a ejidatarios de La Zanja que mantenían un plantón para evitar que siga la construcción de unidades habitacionales de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Ejidatarios de La Zanja, actualmente conocido como La Poza, desde el 4 de septiembre mantenían un plantón para evitar que el Instituto de Seguridad Social de la Fuerzas Armadas Mexicanas (ISSFAM) siga construyendo unidades habitacionales para la Guardia Nacional y Sedena, sin antes indemnizarlos por el terreno que aseguraron los ejidatarios no fue pagado al ejido.
Los inconformes fueron sorprendidos durante la madrugada de este martes, cuando los tres ejidatarios que estaban vigilando el plantón, se refugiaban en sus carros de los vientos y la lluvia provocados por el huracán John.
Quienes estaban velando, cerca de las 6 de la mañana, se percataron de la llegada de decenas de agentes de la Guardia Nacional a bordo de patrullas y camiones y con equipo antimotínes.
Lo que provocó que se bajaran rápido de sus autos para ocupar nuevamente las sillas que estaban debajo de la ramada que los ejidatarios montaron para refugiarse de los rayos del sol durante el día, cuando principalmente las mujeres cuidan el acceso a la obra.
De acuerdo con los ejidatarios, al lugar llegaron cerca de 100 agentes de la Guardia Nacional, quienes los rodearon, mientras ellos resistían hasta la llegada de sus compañeros y familiares del ejido.
Mientras ellos esperaban los refuerzos de los ejidatarios, los agentes quitaron sus sillas y sillones y tiraron la ramada, liberando el acceso.
Todo esto mientras la lluvia y los vientos se mantenían.
A pesar de que fueron llegando los manifestantes, al ver el número de antimotines se sintieron superados, sobre todo porque en su mayoría son señoras de la tercera edad. “No pudimos hacer nada”, dijo el comisario Moisés Ozuna Mújica.
Sin embargo, no desistieron de la lucha, y a pesar de la lluvia, tomaron sus cosas y nuevamente con lonas, palos y cuerdas, montaron su campamento y trasladaron el plantón al camellón central del bulevar Las Palmas, porque aseguraron que se les debe indemnizar.
Desde ahí señalaron ejidatarias que vigilaran y no permitirán que metan más material a la obra ni maquinaria, para así evitar que sigan construyendo.
Desde el 4 de septiembre los ejidatarios exigen la indemnización por el uso de suelo, que aseguraron no les fue solicitado ni se les pagó.
En la última semana, en el lugar había menos personal trabajando porque el material para construir se estaba agotando y ante eso, también comenzaron a sacar maquinaria, debido a que con su plantón los ejidatarios no permitían más ingresos.
Texto: Redacción/ Foto: El Sur
