Ciudad de México, 5 de octubre de 2024. Clara Brugada Molina asumió este sábado 5 de octubre como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, en una ceremonia de toma de protesta realizada en el Congreso capitalino.
La nueva Mandataria, quien llega al cargo tras una destacada trayectoria política y social, inició su gestión con una agenda repleta de actividades.
La jornada comenzó temprano para Brugada, quien a las 09:00 horas ya se encontraba en las calles aledañas al Congreso de la Ciudad de México, ubicado en Donceles esquina Allende, en el Centro Histórico. Allí, la nueva Jefa de Gobierno rindió protesta constitucional, en un acto al que asistió la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Tras la ceremonia oficial, Brugada se trasladó a la calle Independencia, en el exterior del Teatro Metropólitan, donde tenía programada una actividad a las 12:00 horas.
La jornada culminará con una “Caravana de la Capital de la Transformación”, que partirá a las 14:00 horas desde el Eje Central y 5 de Mayo hacia el Zócalo capitalino.
Clara Brugada, de 61 años, llega a la Jefatura de Gobierno respaldada por una sólida trayectoria en la administración pública y el activismo social.
Su carrera política está estrechamente ligada a Iztapalapa, demarcación que gobernó como Jefa Delegacional entre 2009 y 2012, y como Alcaldesa de 2018 a 2023, convirtiéndose en la persona que más tiempo ha estado al frente de esta Alcaldía.
Durante su gestión en Iztapalapa, Brugada se destacó por la implementación de las “Utopías”, espacios públicos que ofrecen a los habitantes acceso a actividades culturales, deportivas y de cuidados.
“Transformamos el espacio público en Utopías”, fue una de las frases que la caracterizó durante su campaña.
La nueva Jefa de Gobierno tiene sus raíces en las luchas vecinales del oriente de la Capital. Su militancia se remonta a la década de 1980, cuando era estudiante de Economía en la UAM y comenzó a dar clases en el Pueblo de Teotongo.
Allí se unió a la Unión de Colonos, un movimiento que impulsó la llegada de servicios urbanos a la periferia.
Brugada llega al Gobierno capitalino tras una contundente victoria electoral el pasado 2 de junio, en la que obtuvo 2 millones 865 mil 742 votos. Su triunfo forma parte de una ola de victorias de Morena, que logró la mayoría en el Congreso local y el control de 11 de las 16 alcaldías.
Entre los principales desafíos que enfrentará la nueva Administración se encuentran la crisis hídrica, la falta de vivienda social y la necesidad de una coordinación metropolitana efectiva.
Para abordar estos retos, Brugada ha anunciado la creación de cuatro nuevas secretarías: Atención y Participación Ciudadana; Gestión Integral del Agua; Vivienda; y Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana.
La trayectoria política de Brugada incluye diversos cargos públicos. Fue diputada federal en dos ocasiones, diputada local en la Asamblea Legislativa del DF, y Procuradora Social durante el Gobierno de Marcelo Ebrard.
También formó parte de la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México en 2016.
Clara Brugada se convierte hoy en la segunda mujer en gobernar la Capital del país. Su llegada a la Jefatura de Gobierno marca un hito en la política local, respaldada por su experiencia en la gestión de una de las alcaldías más pobladas y complejas de la ciudad.
La nueva Mandataria ha enfatizado su compromiso con una visión de izquierda y su convicción feminista.
Su narrativa política se ha centrado en la transformación del espacio público y en la atención a las zonas más necesitadas de la ciudad, un enfoque que ahora deberá ampliar para abarcar las diversas realidades de toda la Capital.
Entre los principales retos que enfrentará Brugada en su gestión se encuentran la seguridad, la movilidad, el medio ambiente, la economía, el abastecimiento de agua y la vivienda.
Su plan de Gobierno incluye propuestas como la creación de una Policía Metropolitana, la construcción de nuevas líneas de Metrobús y Cablebús, programas de reforestación, apoyo a la economía familiar y un ambicioso plan para mejorar el abastecimiento de agua en la ciudad.
Texto: Bernardo Uribe Valdes / Agencia Reforma
