8 octubre,2024 9:08 am

Para dos biólogos de EU, Víctor Ambros y Gary Ruvkun, el Premio Nobel de Medicina

 

Descubrieron los microARN, pequeños fragmentos de material genético que sirven como inte-rruptores dentro de las células y que ayudan a controlar su funcionamiento, lo que podría ayudar en tratamientos contra el cáncer y está relacionado en las vacunas contra el Covid-19

 

Ciudad de México, 8 de octubre de 2024. Dos biólogos estadunidenses ganaron ayer el Premio Nobel de Medicina 2024 por descubrir los microARN, pequeños fragmentos de material genético que sirven como interruptores dentro de las células y que ayudan a controlar su funcionamiento.

Si los científicos comprenden mejor cómo funcionan y cómo manipularlas, esto podría conducir a tratamientos poderosos para enfermedades como el cáncer.

El trabajo de los estadunidenses Víctor Ambros y Gary Ruvkun está “demostrando ser fundamentalmente importante para la forma en que los organismos se desarrollan y funcionan”, dijo el panel que otorgó el premio en Estocolmo, Suecia.

Sus hallazgos “revelaron una nueva dimensión a la regulación genética, esencial para todas las formas de vida complejas”, se dijo en la conferencia en la que se anunció el primer Nobel de este año.

 

¿Cuál es la función del ARN?

El ácido ribonucleico (ARN) es mejor conocido por llevar instrucciones sobre cómo producir proteínas a partir del ADN en el núcleo de la célula hasta las pequeñas fábricas celulares encargadas de construir las proteínas.

El microARN, por su parte, no produce proteínas, pero ayuda a controlar lo que hacen las células, incluida la activación y desactivación de genes críticos que producen proteínas.

El premio tiene eco con los galardonados con el Nobel de Medicina el año pasado, cuando fue otorgado a dos científicos que descubrieron cómo manipular uno de esos tipos de ARN, conocido como ARN mensajero o ARNm, que ahora se usa para fabricar vacunas contra el Covid-19.

El hallazgo de Ambros y Ruvkun se hizo inicialmente en gusanos; buscaban identificar por qué algunos tipos de células no se desarrollaban en dos cepas mutantes de gusanos comúnmente utilizados como modelo de investigación en la ciencia.

“Su revolucionario descubrimiento reveló un principio completamente nuevo de regulación génica que resultó ser esencial para los organismos multicelulares, incluidos los humanos”, según la citación que explica la importancia de su trabajo.

Ambros, actualmente profesor de Ciencias Naturales en la Facultad de Medicina de la Universidad de Massachusetts, realizó la investigación en la Universidad de Harvard. La investigación de Ruvkun se realizó en el Hospital General de Massachusetts y en la Facultad de Medicina de Harvard, donde es catedrático de Genética.

 

Pero, ¿cuál es la importancia del microARN?

El estudio del microARN ha abierto enfoques para tratar enfermedades como el cáncer porque ayuda a regular cómo funcionan los genes en las células, detalló la doctora Claire Fletcher, profesora de Oncología Molecular en el Imperial College de Londres.

Hay dos áreas principales en las que el microARN podría ser útil, explicó: En el desarrollo de fármacos para tratar enfermedades y como posible indicador de las mismas, mediante el seguimiento de los niveles de microARN en el cuerpo.

“Si tomamos el ejemplo del cáncer, tendremos un gen en particular trabajando horas extras, podría estar mutado y trabajando a toda marcha”, dijo Fletcher.

Agregó que los científicos podrían algún día usar microARN para detener tales efectos.

Existen pruebas clínicas en marcha para estudiar cómo podrían emplearse técnicas con microARN para ayudar a tratar el cáncer de piel, aunque todavía no hay ningún tratamiento farmacológico aprobado por los organismos reguladores, añadió Fletcher.

Lo anterior, podría tomar todavía entre 5 y 10 años, según sus estimaciones.

El microARN ofrece otra forma de controlar el comportamiento de los genes para tratar y seguir el rastro a diferentes enfermedades, añadió.

“La mayoría de terapias que tenemos en este momento van dirigidas a las proteínas en las células”, dijo.

“Si podemos intervenir al nivel del microARN, eso abre toda una nueva forma de desarrollar medicinas y controlar la actividad de los genes cuyos niveles pueden verse alterados en enfermedades”.

Con el premio a Ambros y Ruvkun inició ayer la semana del Nobel.

El de Medicina se ha entregado 114 veces a un total de 227 laureados. Apenas 13 mujeres han conseguido el reconocimiento, que incluye 11 millones de coronas suecas (más de 20 millones 400 mil pesos) en efectivo, obtenidas de un fondo dejado por el creador de los galardones, el inventor sueco Alfred Nobel.

Los ganadores del año pasado fueron la húngaro-estadunidense Katalin Karikó y el estadunidense Drew Weissman, cuyos descubrimientos permitieron la creación de vacunas de ARN mensajero contra el Covid-19, que fueron cruciales para frenar la pandemia.

Los anuncios del Nobel 2024 continúan hoy, muy temprano, con el premio de Física, mañana con el de Química, el jueves con el de Literatura y el viernes con el de la Paz, para concluir el lunes con el correspondiente a Economía.

Los laureados recibirán sus galardones en una ceremonia a llevarse a cabo el 10 de diciembre, en el aniversario de la muerte de Alfred Nobel.

 

Texto: Agencia Reforma / Foto: DPA