Nuevos ataques israelíes contra Líbano dejan 16 muertos, entre ellos el alcalde de Nabatiye. De-nuncia la FINUL un nuevo ataque contra una de sus torres de vigilancia en el sur del país árabe
Madrid, España, 17 de octubre de 2024. Los países de la Unión Europea (UE) y del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo (CCG) sumaron ayer sus voces para una petición conjunta de alto al fuego en Gaza y Líbano, en una declaración en la piden contención a todas las partes y la desescalada del conflicto, aparte de denunciar los ataques israelíes a las posiciones de la Fuerza Interina de la ONU en Líbano (FINUL).
La declaración conjunta de los países europeos y los del Golfo, cuyos aspectos principales avanzaron distintas fuentes diplomáticas, incluye la demanda de un “alto al fuego inmediato y completo” en Gaza, así como la liberación de los rehenes y el intercambio de los prisioneros palestinos, en lo que era una demanda de los países árabes.
Los dos grupos regionales reclaman igualmente el “acceso humanitario inmediato y sin trabas a la población civil”, incluida la distribución segura y efectiva de ayuda humanitaria “a gran escala” en toda la franja de Gaza.
Insisten en la solución de los dos Estados para que Israel y Palestina “convivan en paz dentro de fronteras seguras y reconocidas, siguiendo las fronteras seguras y reconocidas”, a lo largo de las líneas de 1967 y ponen el foco en “reactivar un proceso político con este fin”, apuntado al papel de la Autoridad Palestina y el apoyo a una conferencia internacional de paz “en un futuro próximo”.
Respecto a la situación en Líbano, la declaración conjunta subraya la preocupación de los dos bloques regionales por “la peligrosa escalada en el Líbano insistiendo en la llamada a un alto el fuego, la petición de moderación y a la desescalada, así como a evitar la expansión del conflicto a una región más amplia.
En la intervención pública al inicio de la cumbre el emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Thani, ha señalado que las dos regiones son “interdependientes” y se ven afectadas por la “guerra destructiva” de Israel en Oriente Medio.
De lado de la UE, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha señalado que la cumbre “debe mandar un mensaje de unidad y esperanza”.
La jefa del Ejecutivo europeo, Ursula von der Leyen, ha insistido en que los ataques de Hamas el pasado 7 de octubre han dañado la seguridad regional y pone en jaque la ambición económica de ambos bloques regionales, por lo que ha pedido el alto el fuego inmediato tanto en Gaza como en Líbano.
Por otro lado, al menos 16 personas han muerto, entre ellas el alcalde de la ciudad libanesa de Nabatiye, Ahmed Kaheel, tras una nueva oleada de bombardeos perpetrados por el ejército de Israel contra zonas del sur de Líbano que también se ha saldado con 52 heridos, según el último balance del Ministerio de Sanidad libanés.
El ataque ha golpeado el edificio del Ayuntamiento, situado en el centro de la localidad, por lo que entre los fallecidos hay varios trabajadores de la sede del gobierno local, que puso en marcha a principios de julio un proceso para recaudar alimentos y medicamentos y distribuirlos entre los residentes, según informaciones del diario libanés An Nahar.
Se estima que entre los presentes en el momento del impacto se encuentran Sadiq Islamil, funcionario del Ayuntamiento, el fotógrafo Mohamed Salim Baytar y los empleados Qasim Hijazi y Mohamed Zahri.
Las fuerzas israelíes han informado ayer de que han puesto en marcha una nueva oleada de ataques “precisos” contra un suburbio de Beirut, la capital de Líbano, donde tienen como objetivo un “arsenal subterráneo” perteneciente al grupo-milicia chií libanés Hezbolá.
Por otro lado, el Ministerio de Sanidad de Líbano ha confirmado ayer su primer caso de cólera en el norte del país en medio de la ofensiva israelí, por lo que la Organización Mundial de la Salud ha advertido de que el riesgo de un brote es “muy alto” debido al desplazamiento forzado de cientos de miles de personas con motivo de los ataques israelíes.
En tanto, la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) ha denunciado ayer que el ejército de Israel ha llevado a cabo un nuevo ataque contra una de sus posiciones en el sur del territorio libanés, en este caso contra una torre de vigilancia cercana a Kafer Kela, a escasos kilómetros de la ciudad israelí de Metula.
Un carro de combate modelo ‘Merkava’ de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ha disparado contra las posiciones de la FINUL, destruyendo dos cámaras de vigilancia y provocando daños en la torre, según ha detallado la misión internacional de Naciones Unidas territorio libanés en un comunicado en su página web.
Mientras, el gobierno de Israel ha defendido ayer que “no tiene intención” alguna de provocar daños a las tropas o las bases de la misión de paz de la ONU en el sur de Líbano (FINUL), insistiendo en que es Hezbolá quien se sirve de los ‘cascos azules’ como “escudos humanos”, y ha anticipado que este contingente podrá desempeñar “un importante papel” en “el día después” del actual conflicto.
Cinco ‘cascos azules’ de Indonesia y Sri Lanka han resultado heridos en ataques israelíes desde el inicio de la ofensiva terrestre en Líbano, lo que ha derivado en críticas tanto de la propia ONU como de los países con tropas sobre el terreno, entre ellos España. El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha planteado directamente el repliegue de la misión para evitar riesgos.
Los ministros de Defensa de los 16 países europeos que tienen tropas en la Fuerza Interina de la ONU para Líbano (FINUL) han expresado ayer su “preocupación” por la escalada del conflicto y han condenado los ataques contra ‘cascos azules’, resaltando que la misión tiene un “papel clave” para la estabilidad de la zona pese a las peticiones expresas del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para que se retire.
Por iniciativa de Francia, los 16 países, entre ellos Italia, Alemania o España, se han reunido por videoconferencia para reclamar un “estricto respeto” de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, sobre la que pivota el mandato de la FINUL. Los ministros reunidos han dejado claro su compromiso con este despliegue, una “fuerza de observación imparcial” en un momento convulso, según un comunicado del gobierno galo.
Texto: Europa Press
