No se puede hablar de democracia ni de procesos democráticos mientras sigan desapareciendo ciudadanos, señala colectivo y reporta más de 120 mil casos en el país
Chilpancingo, Guerrero, 21 de octubre de 2024. En la décimoprimera Exposición Itinerante de fotografías de personas desaparecidas, integrantes del Colectivo Memoria, Verdad y Justicia denunciaron la falta de políticas públicas de prevención y para proteger a la ciudadanía contra este delito.
La exposición se realiza de manera periódica, el tercer sábado de cada mes en el Zócalo de la capital, donde las madres y familiares colocan las fotografías alrededor del kiosco, así como en las jardineras.
En un mitin la líder del colectivo, Socorro Gil Guzmán acompañada de madres de jóvenes víctimas de desaparición, dio lectura al pronunciamiento de las activistas a 11 meses de iniciar con la exposición, en el cual señaló que, “México se dice país democrático, protector de los derechos humanos, pero en la práctica, la necia y cruda realidad nos demuestra que es falso”.
“No hay políticas públicas de prevención y para protegernos contra la desaparición de personas, a pesar de haber legislación internacional y nacional a este respecto. No se puede hablar de democracia ni de procesos democráticos, mientras tengamos este fenómeno de la desaparición de personas, habiendo más de 120 mil personas desaparecidas en México”.
Señaló la falta de preparación del personal de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas y la Fiscalía General del Estado, para atender a los familiares que se enfrentan a “una lucha de resistencia, contra el tiempo y el olvido, la zozobra, el estrés y contra las mismas autoridades omisas, negligentes, cómplices en muchos casos”.
Puntualizó que las Policías Municipales “son una pieza clave del terror en las desapariciones de personas, pues nada se mueve sin que ellos, sus mandos y toda su estructura, estén enterados y muchos de ellos en contubernio con los grupos delictivos o en muchos casos son los mismos grupos delictivos”.
Ejemplificaron el caso de Taxco, donde policías municipales fueron detenidos y procesados por participar en secuestros.
Las activistas recordaron el caso de Jonathan Guadalupe Romero Gil, hijo de Socorro Gil, quien fue detenido por la Policía Municipal de Acapulco el 5 de diciembre del 2018 y a la fecha, sigue desaparecido.
“Desaparecidos les llaman, les llamamos, pero la gente no desaparece, no se esfuma en el aire como si fueran seres divinos o de cuentos de hadas, no. La gente no se puede desaparecer, es absurdo, a la gente, mujeres y hombres, se las llevan a la fuerza”.
En la manifestación, las activistas coreaban las consignas “¿Por qué los buscamos? Porque los amamos”, “¿Hasta cuándo? Hasta encontrarlos” e “Hijo, escucha, tu madre está en la lucha”.
Finalmente, advirtieron que mientras no haya resultados para localizar a sus familiares y castigar a los responsables para garantizar que los casos no queden impunes, seguirán manifestándose.
Texto: Alina Navarrete Fernández
