Río de Janeiro, Brasil, 17 de febrero de 2018.La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) sostuvo que la decisión del presidente de Brasil, Michel Temer, de autorizar el viernes que las Fuerzas Armadas asuman el control de la seguridad pública de Río de Janeiro “exacerba los problemas de violencia” que enfrenta el estado.
“Abordar la seguridad pública como un problema militar, basado en operaciones militares en favelas, fracasa hace décadas, causa una enorme pérdida de vidas de vecinos y de policías, y exacerba los problemas de violencia de Río”, expresó la ONG en un comunicado divulgado anoche.
Asimismo, HRW reconoció que el aumento de la criminalidad en Río demuestra un “deterioro muy grave” de la seguridad pública, aunque calificó como “preocupante” la decisión del Ejecutivo del país sudamericano de designar un general para comandar a la Policía Civil y Militar de Río.
“La decisión de designar un general del Ejército al comando de la Policía Civil y Militar de Río de Janeiro es bastante preocupante. Río precisa perfeccionar la actuación de la Policía y para eso(…) no precisa de un especialista en guerra”, sostuvo HRW.
En ese sentido, la ONG agregó que la utilización de las Fuerzas Armadas en operaciones policiales es “problemática” porque sus efectivos “son entrenados para combatir al enemigo” y “para la guerra”.
Además, la organización estimó que la medida adoptada el año pasado por el Gobierno brasileño, que decidió que los militares sospechosos de haber cometido ejecuciones en operaciones policiales no sean juzgados por tribunales civiles “es una receta para la impunidad”.
El presidente Temer firmó el viernes un decreto que autoriza que las Fuerza Armadas del país asuman el control de la seguridad pública en el estado de Río de Janeiro.
La medida tendrá vigencia hasta fin de año y, según refiere el decreto, su objetivo es “poner término al grave comprometimiento del orden público en el estado de Río de Janeiro”.
La decisión ocurre en medio de una escalada de la violencia en Río de Janeiro, la ciudad donde viven más de seis millones de habitantes, principalmente durante el carnaval. En varios ‘blocos’ (comparsas callejeras ambulantes) se registraron robos, golpes y “arrastões”, asaltos grupales en los que varias personas roban todo lo que puedan y luego huyen corriendo.
Además, la criminalidad asociada al narcotráfico y las bandas delincuenciales y los enfrentamientos que éstas tienen entre ellas y con la Policía Militar del estado están en constante alza desde 2016, así como los tiroteos en todos los barrios cariocas.
Esta es la primera intervención de este tipo desde la aprobación de la Constitución de Brasil en 1988. La carta magna del país sudamericano prevé que la figura se use como instrumento extremo para resolver situaciones límite.
Texto: Dpa/ Foto: EFE
Asimismo, HRW reconoció que el aumento de la criminalidad en Río demuestra un “deterioro muy grave” de la seguridad pública, aunque calificó como “preocupante” la decisión del Ejecutivo del país sudamericano de designar un general para comandar a la Policía Civil y Militar de Río.
“La decisión de designar un general del Ejército al comando de la Policía Civil y Militar de Río de Janeiro es bastante preocupante. Río precisa perfeccionar la actuación de la Policía y para eso(…) no precisa de un especialista en guerra”, sostuvo HRW.
En ese sentido, la ONG agregó que la utilización de las Fuerzas Armadas en operaciones policiales es “problemática” porque sus efectivos “son entrenados para combatir al enemigo” y “para la guerra”.
Además, la organización estimó que la medida adoptada el año pasado por el Gobierno brasileño, que decidió que los militares sospechosos de haber cometido ejecuciones en operaciones policiales no sean juzgados por tribunales civiles “es una receta para la impunidad”.
El presidente Temer firmó el viernes un decreto que autoriza que las Fuerza Armadas del país asuman el control de la seguridad pública en el estado de Río de Janeiro.
La medida tendrá vigencia hasta fin de año y, según refiere el decreto, su objetivo es “poner término al grave comprometimiento del orden público en el estado de Río de Janeiro”.
La decisión ocurre en medio de una escalada de la violencia en Río de Janeiro, la ciudad donde viven más de seis millones de habitantes, principalmente durante el carnaval. En varios ‘blocos’ (comparsas callejeras ambulantes) se registraron robos, golpes y “arrastões”, asaltos grupales en los que varias personas roban todo lo que puedan y luego huyen corriendo.
Además, la criminalidad asociada al narcotráfico y las bandas delincuenciales y los enfrentamientos que éstas tienen entre ellas y con la Policía Militar del estado están en constante alza desde 2016, así como los tiroteos en todos los barrios cariocas.
Esta es la primera intervención de este tipo desde la aprobación de la Constitución de Brasil en 1988. La carta magna del país sudamericano prevé que la figura se use como instrumento extremo para resolver situaciones límite.
Texto: Dpa/ Foto: EFE
https://suracapulco.mx/2018/02/16/militarizan-rio-janeiro-toman-la-seguridad-publica/
