El presidente dice que los padres y madres de los normalistas desaparecidos “tienen derecho de manifestarse y de inconformarse” y de nuevo defiende al Ejército
Ciudad de México, 27 de julio de 2024. El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, señaló que los padres de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa desaparecidos tienen derecho a estar inconformes, después de la respuesta que dieron al primer reporte que les entregó.
“Los padres, más que nadie los padres, tienen todo el derecho de manifestarse y de inconformarse, yo tengo que pagar mi cuota de humillación si es necesario”, dijo el presidente en su conferencia matutina este viernes.
El presidente aseguró que la respuesta que dieron los padres el miércoles 24 en sus redes sociales al reporte que les envió fue hecha por una organización zapatista y que los padres dijeron que este viernes darán una postura.
El presidente intentó así restar validez a la respuesta de los padres, que fue difundida en sus redes sociales oficiales.
Y más tarde, en el mitin por los 9 años y 10 meses de la desaparición de los normalistas, en la Ciudad de México, representantes de las madres y padres, efectivamente leyeron la respuesta al reporte de López Obrador que sí tiene consenso, y se deslindaron de la difundida en sus redes, porque no fueron consultados.
“Hoy en la mañana me dijeron de que no era un documento de ellos sino de una organización pro zapatista, zapatista, de los nuevos zapatistas y que ellos iban a sacar hoy un comunicado, un documento”, mencionó López Obrador, que reconoció no haber leído el texto difundido por los padres y madres este miércoles 24.
El comunicado de los padres y madres es la respuesta al reporte que el presidente López Obrador les entregó a partir del 8 de julio, uno por uno y en diversas fechas, que se centra en la defensa que el presidente hace del Ejército y en su reiterada insistencia de que no hay pruebas de que los militares hayan participado en la desaparición de los 43 normalistas, y no aporta información sobre lo que ocurrió con ellos y su paradero. Los padres y madres, en su respuesta, declaran que el presidente López Obrador faltó a su promesa de resolver el caso de sus hijos, y le dicen: “Usted, señor presidente, nos ha mentido, nos ha engañado y traicionado”.
A la pregunta de una reportera este viernes, López Obrador negó que se llegue a tensar la relación con los padres de familia y que se debe hablar con la verdad, ya que considera que los hechos fueron distorsionados. El presidente señaló que realizó el reporte para que la información llegara de manera directa en los padres y no se quedara en los representantes legales.
“Eso es lo que se nos ha dificultado por una serie de factores que no han ayudado, empezando porque el gobierno anterior inventó la llamada verdad histórica de que los habían quemado en un basurero y habían tirado los restos a un río, algo que ya se demostró que fue completamente falso”, señaló López Obrador.
De igual forma el presidente mencionó que lo más importante es encontrar a los normalistas desaparecidos y aprovechó para señalar que en la cárcel hay más de 100 personas relacionadas al caso, incluidas dos generales, que salieron pero mantienen el juicio y 20 soldados.
López Obrador recordó que una primera versión fue que los policías municipales detuvieron a los normalistas y posteriormente los entregaron a Guerreros Unidos, que fue aceptada por organismos de derechos humanos.
“Al principio la versión era de que a los muchachos los detienen las policías, la policía de Iguala, la policía de Cocula y los entregan a la delincuencia organizada, un grupo conocido como Guerreros Unidos, que eran los que dominaban en toda la región. Y que van deteniendo a los jóvenes, unos los sacan de la cárcel de Iguala, otros los detienen en camiones y los entregan a los grupos de la delincuencia; los entregan las policías; y que los desaparecen. Esa es una versión en general, esa versión se mantiene durante algún tiempo, incluso esa versión la sostienen organismos de derechos humanos a nivel internacional”, comentó.
Agregó que la primera versión de que el Ejército participó en la desaparición, la dio la periodista Anabel Hernández de quien el presidente dijo que le consta que es capaz de calumniar y reiteró su solicitud de que la escritora revele el nombre de su informante, que se mantiene anónimo.
“¿Por qué ella no dice quién es su fuente? Porque, según su declaración a diferencia de que los jóvenes los detuvo la policía y los entregó a Guerreros Unidos, su dicho de ella es que había en ese entonces en Iguala un capo de capos, o un capo muy importante, que traficaba droga desde Iguala hasta Estados Unidos”, mencionó.
Señaló que la versión de Hernández indica que a los soldados se les ordenó dar un escarmiento a los jóvenes, por lo que los llevaron al Batallón de Iguala, pero el presidente dijo que no tuvo ninguna prueba y remarcó que Hernández fue testigo en la solicitud de asilo del juez de barandilla municipal, José Ulises Bernabé, quien afirmó que los normalistas nunca estuvieron presentes en la comandancia.
Agregó que el Departamento de Justicia de Estados Unidos, otorgó asilo a Bernabé pero en la resolución la corte de Arizona señaló que lo más plausible era que la desaparición fue una decisión del gobierno y policías federales.
“Entonces ellos tienen ya como consigna el que fue el Ejército, exactamente lo que dice Anabel; nada más que, si no hay pruebas, yo no puedo inventar nada. Nada más lo único que quiero es tener las pruebas”, indicó.
Mencionó que solamente por el presunto delito de omisión y delincuencia organizada están procesados militares, ya que se demostró que estuvieron en calles, comandancia y el hospital donde estaban normalistas, pero que no hay pruebas de que llevaron a los estudiantes al cuartel.
Agregó que se pidió la entrega total de la información que tiene la Secretaría de la Defensa Nacional y que la Administración para el Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) proporcionó llamadas en las que delincuentes hacen referencia al coronel Rafael Hernández Nieto, procesado por delincuencia organizada, pero el presidente argumentó que no pertenecía a Iguala sino a Ciudad Altamirano y fueron tres meses antes.
Señaló que por parte de las agencias militares se busca debilitar a las instituciones nacionales, ya que según él, al tener un gobierno débil “pueden mandarnos desde el extranjero”.
El próximo lunes 29 de julio, se tiene programada una reunión entre los padres y madres de los 43 normalistas y el presidente López Obrador, aún se mantienen pendientes los detalles del encuentro entre los padres y la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo.
Texto: Juan Luis Altamirano
