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Se queja Robin Sidney del traslado del burro de la Roqueta; era una molestia: Capitanía

Karla Galarce Sosa

La ambientalista Robin Sidney Gordon denunció que Julio, el emblemático burro que vivía en la isla de la Roqueta, fue trasladado en un cayuco fuera de ese lugar sin que se haya dado una explicación del traslado.
El jefe del departamento de señalamiento marítimo de la Capitanía de Puerto de Acapulco, Enrique Domínguez Domínguez, dijo que la dependencia estatal decidió sacar al animal de la isla porque ocasionaba muchas más molestias que ayuda a la SCT, además que su ausencia no impedía el funcionamiento del faro, por lo que fue donado a un campesino del poblado Dos Arroyos.
Sidney Gordon dijo que el martes por la tarde, Julio fue trasladado en panga por el canal de Bocachica. “Nadie sabe nada de por qué se llevaron al animal, ese animal es muy querido por la gente, es como un ícono, todos quieren saber a dónde se lo llevaron, si lo jubilaron, que nos digan por qué”, declaró vía telefónica la ambientalista.
Recordó la denuncia que hizo hace dos meses, de que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no enviaba alimento al animal, a pesar de que contaba con un presupuesto de la federación para ello, por lo que bajaba por las tardes a comer de la basura que los visitantes dejaban en los cestos colocados en la playa certificada recientemente.
“El animal tiene décadas en el faro, es un ícono, lo que nosotros pedíamos era que le dieran de comer”, finalizó.
En entrevista por separado, Domínguez Domínguez explicó que la SCT tiene designado un guarda faro que se encarga de encender las luces que funciona con diesel.
Mencionó que anteriormente, el animal estaba a cargo del guarda faro, pero que ahora, desde que dejó de haber presupuesto para su alimentación, se tomó la decisión de donarlo a un campesino del poblado Dos Arroyos.
“Se decidió porque ya no lo utilizamos al animal desde hace tiempo, antes, un burro que estuvo allí por años, servía para subir piezas de la planta, pero este animal era muy arisco y no se dejaba cargar partes de la maquinaria, así es que el guarda faro optó por subirlas con diablitos”, declaró.
Domínguez Domínguez agregó que “la señora Covadonga Gómez Huerta y algunas personas que forman parte del comité de certificación de playa, nos pidieron que tuviéramos al animal amarrado para evitar que bajara a la playa, pero no podemos tener así a ese animal; incluso a mí me decían que era un peligro por alguna patada que pudiera darle a algún turista, pero para evitar ese tipo de problemas es que decidimos sacarlo de la isla. El funcionamiento del faro no se ve afectado porque el burro no esté”.

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