Jorge Camacho Peñaloza

Acuerdo por Guerrero

*Es más fácil luchar por unos principios que vivir de acuerdo con ellos.

Alfred Adler.

Como en cada proceso electoral, se acercan ya los tiempos de la definición del futuro al que aspiramos como sociedad, de la exposición de las visiones que tenemos del Guerrero que queremos, de confrontación y valoración de propuestas y capacidades de liderazgo y de dirección de gobierno, aunque también vienen tiempos de futuras promesas incumplidas, simulaciones y falsedades.
Como en cada proceso electoral, son tiempos también de oportunidad para reinventar la política o para intentar una nueva política, o simplemente para retornarla a su origen, como un esfuerzo de deliberación colectiva que se expresa en consensos y disensos sin perder su objetivo fundamental, que es el de mantener a la sociedad cohesionada en torno a los intereses superiores de la colectividad.
Como en cada proceso electoral, es necesario intentar abrir una nueva deliberación política, que este proceso que viene se salga del esquema tradicional de la expresión de aspiraciones y ambiciones individuales, campañas internas, entre y en torno a candidatos ya definidos por los partidos, marketing y exaltación de las cualidades y virtudes personales de los candidatos.
Se dice que el electorado vota hoy más por el candidato que por los partidos, por el carisma y mensaje que por la oferta o programa partidista, que las campañas son periodos de confrontación y aniquilamiento de las figuras y percepciones entre los candidatos, de la persecución de peldaños en carreras políticas y de cercanías de influencia por parte de los seguidores; hoy, lo procesos se han convertido en una situación de perspectiva laboral más que de la construcción de ese futuro que visualizamos y anhelamos como sociedad.
Es tiempo ya de que empecemos a modificar el tradicional proceso electoral dirigido desde los partidos, sus grupos y corrientes, es necesario que la sociedad y la ciudadanía tengan una mayor injerencia, dirección e influencia en la forma en que se desarrollan los procesos electorales, ya es momento de que la sociedad disponga qué hacer, cómo hacer y para qué hacer el proceso electoral, sobre todo en sociedades como la de nuestro estado en la que al parecer la tradicional forma de hacer política no está resolviendo los grandes problemas por los que nos mantenemos como uno de los estados más atrasados y menos eficientes en todos los sentidos, aunque con sus honrosas excepciones.
Vamos a proponer que en el próximo proceso electoral, cuyo arranque constitucional es el 7 de octubre, la sociedad convoque a los aspirantes a gobernador, diputados o presidentes municipales a que firmen un acuerdo de compromisos fundamentales o programa de acción discutido y delineado desde la sociedad, que vaya más allá de las plataformas electorales y las ofertas políticas que cada candidato haga, es decir, que firmen una propuesta de gobierno surgida de la sociedad, hacer política desde la sociedad y no sólo desde los partidos.
Que los aspirantes y candidatos firmen un acuerdo por Guerrero impulsado por la sociedad a partir de las instalaciones de mesas de trabajo en las que participen líderes de cámaras empresariales, sindicatos, organizaciones de la sociedad civil, del consejo interreligioso, de medios de comunicación, productores, estudiantes, pueblos indígenas y organizaciones no gubernamentales quienes definan las líneas fundamentales y generales que debe asumir el futuro gobernador y que, por tener ese carácter tendrían la virtud de hacer coincidir a todos esos sectores de la sociedad, y al ser así y rubricadas se traducirían en un verdadero mandato, repito, en un verdadero mandato de la sociedad para el gobernante, y no aquel mandato al que pomposamente se refieren algunos para sólo engalanar orondamente sus discursos.
Guerrero va a cambiar sólo si la política cambia, si la política sigue igual y no cambia, Guerrero no va a cambiar y va a seguir siendo lo que hasta ahora es, uno de los estados más pobres y menos desarrollados del país; un momento oportuno para hacer las cosas de diferente manera es un proceso electoral como el que se avecina, en el cual si seguimos haciendo las mismas campañas y la misma contienda las cosas en Guerrero van a seguir igual, por eso decimos que es momento de generar un gran consenso, más allá de la confrontación y disputa electoral.
La propuesta es sumar voluntades, el diálogo, el acuerdo, hacer que surja y se haga respetar un verdadero mandato de la ciudadanía, del pueblo, la sociedad o la gente, un mandato que en Guerrero ha estado casi ausente, y por lo cual se ha gobernado como se ha gobernado. Vamos por un acuerdo por Guerrero porque un Guerrero diferente si es posible.
Vuela vuela palomita y ve y dile: a todos los aspirantes y suspirantes que ya es momento de demostrar que, más que lo que nuestros partidos ganen, lo más importante es lo que la sociedad nos mande, antes de que a volar nos manden.