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No protege a Zeferino Torreblanca en el caso Chavarría, responde Rogelio Ortega

*Soy absolutamente respetuoso de la autonomía de la Fiscalía General”, dice a Martha Obeso. No encubre a nadie ni tampoco fabrica culpables, abunda el gobernador. Afirma que él también exige justicia y castigo a los responsables del asesinato del diputado del PRD

Carlos Navarrete Romero

Chilpancingo

El gobernador Rogelio Ortega Martínez manifestó que la Fiscalía General del Estado (FGE) es un ente autónomo, por lo que no puede recibir órdenes del Ejecutivo, en respuesta a las declaraciones de Martha Obeso Cázares, viuda de Armando Chavarría Barrera, quien lo acusó de intentar proteger a Zeferino Torreblanca Galindo en las investigaciones por el asesinato del presidente del Congreso local.
Ayer se publicó en estas páginas una entrevista con Martha Obeso, quien aseguró que Ortega Martínez no tiene anotado en su agenda el esclarecimiento del asesinato de su esposo, porque responde a “intereses políticos y amistosos” con el ex gobernador Zeferino Torreblanca, pese a que Chavarría y el actual gobernador fueron amigos de la juventud en su paso por la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG).
Mediante un desplegado que se publica en estas páginas, el gobernador negó los señalamientos de Martha Obeso y aseguró que comparte la exigencia de justicia por el asesinato, cometido en agosto del 2009 y que a la fecha sigue sin esclarecerse.
“Cuenta con esa seguridad: el gobernador de Guerrero no encubre a nadie; tampoco fabrica culpables. Exige, como tú, justicia fincada en investigaciones claras, a fondo y con celeridad. Y con ello, sanciones apegadas a la ley para quienes resulten responsables”, se lee en el penúltimo párrafo de la carta.
Ortega Martínez se dijo respetuoso de la autonomía de la Fiscalía General del Estado (FGE), “no pienses que con ello pretendo eludir la responsabilidad que me corresponde. Desde el Ejecutivo que encabezo en Guerrero mantengo la misma demanda, en este caso como en otros, de justicia plena y expedita”.
Le recordó que las investigaciones por el homicidio de Chavarría Barrera están en manos de la FGE, que encabeza Miguel Ángel Godínez Muñoz, institución a la que “sin duda le es exigible toda la celeridad e indagatorias a fondo para hallar a los responsables últimos del asesinato de quien fuera un destacado político”.
Explicó que es “lógico suponer, por la cultura que hemos vivido en el estado y en el país, que el gobernador puede ordenarle al Fiscal General cuanta cosa le venga en gana. Y cómo no pensarlo si así funcionó por años. En mi caso, soy absolutamente respetuoso de la autonomía de la Fiscalía General, a la que todos los guerrerenses tenemos el derecho de acudir y de recibir respuesta a nuestras peticiones de justicia”.
En la carta, el gobernador le manifestó a Martha Obeso que ha sido parte de sus “convicciones personales el reconocer y ser solidario, en palabras y en hechos, con todo aquello que en nuestra vida hemos aprendido que es justo. No podría ser diferente, y no lo es, ahora que estoy en la gubernatura de nuestro estado”.
Insistió en que comparte la exigencia de que se aclare el crimen de Armando Chavarría, “tal como lo manifesté en diversas ocasiones no siendo gobernador, y lo ratifico ahora. Eso es parte del Estado de Derecho que buscamos construir con un gobierno diferente. Muchas prácticas tendremos que cambiar. Así lo intentaremos hasta el último día de mi gobierno”.
En la carta el gobernador aclaró que no pretendía tener una discusión pública con la viuda de Chavarría, “que pudiera lastimar la amistad que por años nos ha unido”.

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