Sofocan un fuego en el basurero municipal de Zihuatanejo; se queman más de 30 toneladas de basura

*La gran cantidad de desechos incendiados se debió a que el relleno sanitario de la ciudad está rebasado en su capacidad, declara el alcalde

Brenda Escobar

Zihuatanejo

Esta mañana hubo un incendio en el basurero municipal de Zihuatanejo que fue controlado por los bomberos después de 11 horas.
Los pepenadores y vecinos del lugar solicitaron la presencia de los bomberos poco antes de las 9 de la mañana, después de que notaron que empezaba a salir humo y lumbre de entre los desechos.
Al lugar acudieron elementos de Protección Civil y Bomberos municipales y estatales, así como policías estatales que se sumaron a la tarea de hacer guardarrayas para impedir que el incendio se propagara, además de trabajadores de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Zihuatanejo y marinos del Sector Naval que acarrearon agua en pipas.
El alcalde de Zihuatanejo, Luis Fernando Vergara Silva acudió al basurero y declaró a los reporteros que se trataba de una situación de emergencia por la gran cantidad de partículas contaminantes que subían con el humo al ambiente; dijo que tenían que trabajar a marchas forzadas para aprovechar que el viento soplaba en ese momento en dirección contraria a la zona hotelera de Ixtapa, ya que la gran columna de humo se podía apreciar incluso desde algunos lugares de la ciudad de Zihuatanejo.
La labor de controlar el incendio duró 11 horas, sin embargo, los bomberos seguían en el sitio trabajando para sofocarlo; se estima que se quemaron poco más de 30 toneladas de basura que estaba a cielo abierto, pues el relleno sanitario está rebasado en su capacidad y la nueva celda no cumple con los requerimientos que indican las normas ambientales y que en esas condiciones pretendía el delegado de la Semarnat entregarla al gobierno municipal, declaró el alcalde.
Durante la mañana, uno de los pepenadores, Gustavo Albarrán, criticó que el gobierno municipal no tuvo la voluntad para cumplir con la demanda de los pepenadores que hasta en dos ocasiones se vieron obligados a manifestarse y a bloquear el acceso al basurero para exigir que el ayuntamiento asignaría maquinaria para mover los desechos, e incluso, dijo, les advirtieron que en cualquier momento podría ocurrir un incendio de esas dimensiones, como ya ha pasado antes, “simplemente no nos hicieron caso y ahí están las consecuencias que se pudieron haber evitado si hubieran tenido la voluntad”.