Admite Peña Nieto muchos pendientes en derechos humanos

*Promete el presidente castigar la tortura y la desaparición forzada. Se adoptarán las mejores prácticas internacionales y se aceptarán recomendaciones para garantizar investigaciones oportunas, exhaustivas e imparciales, anuncia

Agencia Reforma

Ciudad de México

El presidente Enrique Peña Nieto reconoció que falta mucho por hacer en materia de derechos humanos.
Luego de escuchar el informe anual de actividades de la CNDH que presentó el ombudsman Luis Raúl González, el Mandatario argumentó que el Gobierno federal trabaja en el tema pues se tiene claro que no cabe la tolerancia a prácticas como desapariciones forzadas, tortura y ejecución extrajudicial.
Además convocó a los gobiernos estatales a asumir también su responsabilidad, al justificar que es una tarea compartida.
“La esperanza de una convivencia pacífica, armónica y apegada a la ley, sólo podrá concretarse si se ubica en el centro de toda la Administración Pública la defensa y protección de los derechos humanos, y la atención integral a las víctimas.
“Aún tenemos mucho qué hacer como Estado mexicano en favor del respeto y goce pleno de los derechos humanos”, sostuvo.
Frente a defensores de derechos humanos y representantes de organismos internacionales, el primer mandatario externó que en dos años la Administración federal recibió mil 986 quejas menos, además de que ha presentado diversas propuestas legislativas para modernizar el marco legal, pero aún están en el Congreso, sobre desaparición forzada y tortura.
“Una segunda acción es la renovación de los protocolos y procedimientos institucionales para erradicar y sancionar los casos de tortura, desaparición forzada y ejecución extrajudicial.
“En el Gobierno de la República estamos claros de que no cabe la tolerancia a estas prácticas inhumanas y absolutamente inaceptables”, indicó.
Prometió que para castigar estos graves delitos van a adoptar las mejores prácticas internacionales y aceptarán recomendaciones de la Comisión para garantizar investigaciones oportunas, exhaustivas e imparciales.
Pese a que el ombudsman reiteró en varias ocasiones las violaciones cometidas el caso Tlatlaya, donde militares ejecutaron a civiles, y en la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, en el que demandó no cerrar el tema, el Presidente Peña Nieto no hizo referencia a ninguno de ellos.