Toman la secundaria de Tuxpan; ahora son padres que apoyan al ex director y piden su reinstalación

*El conflicto se ha agudizado y la mañana de este lunes hubo enfrentamiento con  insultos, amenazas y empujones

Alejandro Guerrero

Iguala

Padres de familia de la secundaria Manuel M. Ponce, de Tuxpan, ahora del grupo que apoya al director de la escuela, Santos Espinoza Arriaga, tomaron la institución para pedir la reinstalación del maestro que fue cesado el viernes por la noche.
El conflicto en esta comunidad, entre padres de familia que piden la salida del director por supuestos malos manejos del recurso y abuso de autoridad, y ahora quienes lo respaldan y piden su reinstalación al ser víctima de calumnias, mentiras y difamación, se ha agudizado al grado de registrase la mañana de este lunes un conato de enfrentamiento entre ellos, que no pasó de los insultos, las amenazas y los empujones.
El 16 de junio, unos 40 padres de familia, encabezados por su presidente Ángel Morales Manzanares, y respaldados por maestros y la comisaria municipal Magdalena Hernández, tomaron la escuela y pidieron la salida del director Santos Espinoza, a quien acusaron de malos manejos del recurso de la cooperativa de la escuela y abuso de autoridad.
Después de cuatro días de protesta, el delegado regional de los Servicios Educativos de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) en la zona Norte, Jorge Isaac Miranda Salgado; el supervisor de la zona 06 de secundarias generales, Efraín Soto Bahena y representantes de sindicales de la sección 14 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en la región, definieron la salida del director, el cual se tendría que presentar a partir de ayer en la supervisión.
Ante esta definición, un grupo de unos 15 padres de familia, 50 según ellos, tomaron a partir de este lunes la escuela, en exigencia de la restitución del director Espinoza Arriaga, el cual consideran que está siendo objeto de difamación, calumnias y mentiras.
Los padres de familia, que omitieron sus nombres, pidieron una auditoría a la escuela “y que se sancione a quien corresponda, pero si no hay ninguna anomalía, que se reinstale al director”.
En la calle, afuera de la escuela, colocaron piedras para impedir el paso de vehículos y en el portón de entrada colocaron cartulinas, en las que demandaron una auditoría al plantel y al comité de padres de familia, así como la reinstalación del director y la salida de la subdirectora, Ivy Estrada Escalera, a quien señalan como la responsable del conflicto, al tener interés de asumir la dirección de la escuela.
El grupo de padres de familia responsabilizó al otro grupo, encabezado por la comisaria del pueblo y el presidente del comité, de lo que les pueda suceder, al llegarles la información de que en una reunión que tuvieron amagaron con quemar las casas de los que ahora protestan.
En declaraciones hechas afuera de la escuela, el director Santos Espinoza señaló un “conflicto de intereses” y confirmó que el delegado de la SEG, Isaac Miranda, le notificó el viernes por la noche, verbalmente y no por escrito, que a partir de ese día estaba fuera de la escuela y que este lunes se tenía que presentar a la supervisión de zona.
Señaló que en ningún momento le requirieron información de lo que se le acusa, ni le permitieron defenderse y afirmó que en el departamento de ingresos propios de la delegación de la SEG, tienen los informes mensuales que entrega del recurso que se genera de la escuela de la cooperativa, también desmintió el maltrato a alumnos y docentes.
A pregunta, consideró que hay intereses sindicales y personales atrás de este conflicto, al pretender dejar en la dirección de la escuela a la subdirectora, Ivy Estrada, quien es esposa del ex secretario de Organización 7 del SNTE y actual miembro de la estructura sindical, Javier Sanmartín Jaramillo.
El director pidió que se haga una investigación en la escuela, por parte de la contraloría interna, y que la resolución se le dé por escrito y no sólo de forma verbal.
Sobre la postura de la mayoría de los maestros que apoyan la petición de su salida, consideró que éstos “esperan algún beneficio del sindicato”.
Señaló su preocupación por el cierre del ciclo escolar, en el que se espera que 34 alumnos egresen.