En México se ve al éxito como un triunfo individual y no como colectivo, afirma Martín Hernández

Fidel Orantes / Agencia Reforma

Ciudad de México

Martín Hernández, nominado al Óscar por el diseño de sonido de Birdman, considera que México es un país “ojete” por pensar que el éxito de una sociedad depende de los reconocimientos personales, y no del avance colectivo.
“Quería agregar algo a lo de la parte del país trágico que es, pero también me parece un país ojete. Tenemos toda esta cosa fantástica del mundo de ahora, del que estamos hablando con varias áreas con reconocimiento, pero eso no es del todo real. A mí me gustaría pensar, y eso le platico a mis hijos, que el éxito tiene que ver con la manera en que puedo permear a los que están alrededor mío. No puedo tener éxito en una cápsula y ver que todo lo demás se está desmoronando”, dijo Hernández durante la conferencia Héroes de nuestros días, organizada ayer por la revista Esquire.
Cuando se le preguntó qué cualidades debía tener el hombre exitoso de la actualidad, mencionó que el éxito que él ha tenido o trabajar junto a gente importante, como Sean Penn, no lo capacitan para decirlas.
“No las sé y no creo que sea alguien con legítima credibilidad para definirlo ni nadie que pudiera tener ni esa ni ninguna otra definición. Me resulta más importante aprender de quienes están satisfechos con su trabajo. Los títulos de tener éxito o ser un héroe son, en mi caso, una aberración que ni la puedo controlar y tampoco la quiero potenciar”, agregó.
Más que los triunfos, apuntó que la gente debe gozar al ejercer cualquiera que sea su labor o su profesión, así como él día con día, pues él lo ha hecho tanto en la radio como en el cine, razón por la que no le gusta quejarse.