Un performance mezclado de blues, rock y poesía leída con pasión: Nudo vortex

Óscar Ricardo Muñoz Cano

Una mezcla entre poesía y música fue lo que presentó la escritora Rocío Cerón, en compañía del guitarrista Mario del Río, en un performance de nombre Nudo vortex la tarde de este viernes en el Centro de lectura Carlos Fuentes, del Centro Cultural Acapulco.
La palabra renovada, pasión pura, personal y propositiva de la poeta, dio cuenta del ánimo de las apenas veinte personas que se dieron cita para escucharla, pero que no por ello demeritó un trabajo que va en su séptima entrega y que tiene como premisa el hecho de que al poema hay que dejarlo sonar.
Nudo vortex, explicó la escritora previo a su participación, “fue en su momento un proyecto de escritura procesual, las primeras cuatro ediciones, el libro se fue escribiendo, reescribiendo, destruyendo y volviendo a escribirse un poco con la testificación que el público hacía de los poemas”.
“Qué quiere decir esto, que cada vez que yo leía iba yo un poco escuchando como sonaban los poemas, re-escuchando cómo iban sonando en los cuerpos de la gente que estaba ahí, en el público, y los iba destazando, reescribiendo o los iba estabilizando en la hoja”, abundó.
Así, desfilaron uno a uno los poemas del libro, que publicó la editorial Literal este 2015, y que si bien en el libro son los mismos, inmóviles, en el espacio escénico donde se representaron no, puesto que los ritmos melancólicos y tristes que emanaron de la guitarra de Del Río y la vocalización de Cerón los volvieron únicos.
Agujeros negros: brochazos de azul Kelin sobre muro, Arqueología del padre o Reliquias sobre un espacio despoblado, fueron algunos de los textos que desfilaron a ritmo de blues con destellos de rock.
Para cerrar, la poeta nacida en la ciudad de México dio cuenta del último poema del libro, Estela colectiva de un memorial en los jardines de abetos, “que escribí en un vuelo México-Varsovia, Varsovia-México, en esas 22 horas de suspensión, de Depeche Mode clavada en un concierto, recordando sobre todo la música del mundo y lo que pasa en el mundo”.
Con  frases como “desaparezcamos las mierdas de perro en las calles, capaz y el aire se conmueve”, o “el mundo no es sólo política, y lo es a la vez, como el poema”, concluyó su participación en medio de los aplausos.
Nudo vortex, de Rocío Cerón, se presentó como parte del programa Escritores en Verano de la Secretaría de Cultura de Guerrero, que inició el pasado 14 de julio y que ofrecerá actividades todos los martes y viernes de julio y hasta el 14 de agosto.