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Adjudica Suástegui a Jacinto Solís, Domingo Baylón y Humberto Marín la carta en que lo amenazan

El vocero de la Cecop insistió en que no existe tal el Comité de la Verdad que firma la misiva y que detrás de esta campaña están los mismos personajes que están cooptando a la gente para desarticular a su organización y comprando tierras para revenderlas a la CFE para reactivar el proyecto de la hidroeléctrica

 

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Desde la prisión de La Unión, el vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a La Parota (Cecop), Marco Antonio Suástegui, señaló a tres personas que encabezan la campaña de desprestigio contra él y el movimiento; las mismas que él acusó de tráfico de drogas y armas en los bienes comunales ante el exgobernador Ángel Aguirre Rivero hace tres años y que el ejecutivo se negó a investigar porque eran parte del mismo plan.
Uno de ellos y los familiares de otro encabezaron la protesta del jueves en el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) para exigir a los magistrados que mantengan en prisión al luchador social, porque se estima que saldrá en libertad bajo fianza la próxima semana.
Acusó a los excomuneros de los bienes comunales Jacinto Solís Vázquez, Domingo Baylón Dorantes y al dueño de una gravillera en Parotillas, Humberto Marín Molina, quienes precisamente lo acusaron de daño, lesiones y robo calificado, delitos por los cuales sólo por el último no alcanzó la libertad bajo fianza.
Ayer, a través de escrito dirigido a varios reporteros, el Comité por la Verdad de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, se adjudicó la carta de amenaza que recibió Marco Antonio Suástegui en La Unión. Como voceros firman Pedro León y María San Juan.
Pero Marco Antonio insistió en que Pedro León es un seudónimo, no existe, así como el Comité de la Verdad. Detrás de esta campaña están los mismos personajes que están cooptando gente para desarticular al Cecop y comprando tierras para revenderlas a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para reactivar el proyecto de la hidroeléctrica.
En consulta telefónica, Suástegui Muñoz señaló que a diferencia de las denuncias contra los opositores, estas personas son quienes “están sembrando el terror, el miedo en contra de los habitantes y comisarios municipales”.
Recordó que hace tres años pidió al Aguirre Rivero que los investigara por tráfico de armas de grueso calibre, porque Jacinto Solís lidera a un grupo de sicarios y se dedica al narcomenudeo en La Concepción.
Aseguró que Jacinto Solís y Domingo Bailón fueron expulsado de La Concepción en asamblea que avalaron incluso sus familiares, porque son muy conflictivos. El segundo estuvo en la cárcel acusado de violación y a la fecha sigue su proceso en libertad.
Consideró que es tiempo de presentar las denuncias formales por delincuencia organizada en el Ministerio Público en su contra, así como de Humberto Marín, para que sean ellos los que estén en prisión.

También hubo amenazas a María de la Cruz

Suastegui denunció que María de la Cruz Dorantes, activista del Cecop y prisionera en el penal de  Acapulco, también recibió amenazas de muerte, pero lo habían reservado porque el penal de Las Cruces no garantiza su seguridad.
Indicó que hace tres meses recibió en la cárcel a a dos hombres que le ofrecieron dinero, y la segunda vez que se acercaron le dijeron que aceptara la culpa y acusara a Marco Antonio del robo calificado o irían por sus hijos, menores de edad, y su papá, que también tiene orden de aprehensión por este delito.
Ahora, aclaró que lo puede decir porque ya se elaboró el acta que van a presentar en la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero (Codehum), para solicitar garantías.
Como antecedentes de los implicados en La Parota, indicó que Humberto Marín Molina no es de Guerrero, llegó hace 15 años a instalar la gravillera en Parotillas, donde fue asesinado el comunero Antonino Cruz, porque no quiso venderle sus tierras y obligaron a su viuda a malbaratar sus bienes. “En sus tierras tenía un banco de grava que hasta hace un año explotaban estas personas”.
En tanto, Domingo Bailón y Jacinto estaban comprando tierras a nombre de ellos, en su calidad de comuneros de los bienes comunales (luego fueron expulsados), para después vendérselas al empresario, “lo que estaban haciendo es consolidar el cacicazgo de Humberto Marín, y ya estaba comprando muchas hectáreas sobre el camino que va al vaso de la presa”.
Compraron terrenos en Parotillas, La Concepción, Los Ilamos, Cacahuatepec, y en últimas fechas en Rancho las Marías y Las Parotas, donde se pretendía construir la gran cortina de 200 metros de altura.
Estimó que el Cecop se movilizó a tiempo en 2014, porque con mayor influencia están personas iban a decidir en lugar de los comuneros.
Consideró que el exgobernador Aguirre Rivero, estaba de acuerdo con ellos pero siempre manejó un doble discurso. “Teníamos al enemigo en casa, tuvimos pláticas con el exgobernador y sólo decía que sí, que pidió apoyo al gobierno federal para investigar a estas tres personas, nos dijo que incluso la Profepa y Comisión Nacional de Agua le iban a cancelar la concesión para explotar grava, pero en cuanto vio la oportunidad de encarcelarnos, lo hizo para desmantelar el Cecop”.
Confió en que pese a sus manifestaciones, saldrá en libertad bajo caución cuando el juez resuelva un amparo previsto para el jueves 14 de agosto, y entonces los van a llevar a quienes lo señalan ante la justicia, “porque nos vamos a carear ante MP, y salga nos vamos a enfrentar ante las autoridades”.

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