Empleados públicos protestan contra el ajuste fiscal que propone Rousseff

DPA

Brasilia

Sindicatos de empleados públicos brasileños que apoyaron históricamente al gobernante Partido de los Trabajadores (PT) realizan ayer una serie de protestas en todo el país contra el ajuste fiscal propuesto por el gobierno de Dilma Rousseff.
Según la Central Única de Trabajadores (CUT), entidad en la que militó el ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva, las protestas de ayer, que tendrán un acto central en Brasilia, son la antesala de una huelga general contra el ajuste fiscal y “en defensa de servicios públicos de calidad”.
En la capital federal, empleados públicos y otras entidades como el movimiento de los Sin Techo, entre otros, pretenden llegar hasta la sede del Ministerio de Planificación con el fin de solicitar una audiencia con el titular de esa cartera, Nelson Barbosa.
Las protestas también buscan presionar al Congreso para que no apruebe las medidas de ajuste fiscal con que el gobierno intenta revertir el déficit en las cuentas públicas previsto para 2016, y que ocasionó que la agencia de calificación Standard & Poor’s le rebajara la nota a Brasil y le quitara el grado de inversión.
Para enfrentar esa situación, el equipo económico del gobierno, comandado por Barbosa y el titular de Hacienda, Joaquim Levy, anunciaron una serie de recortes o bloqueo de gastos, así como el aumento o la creación de impuestos para aumentar la recaudación estatal.