Levantan maestros de la CNTE los cercos sobre las sedes del Senado y la Cámara baja

*Acuerdan permanecer en el Zócalo del DF y convocan a una gran movilización el próximo primero de septiembre durante el informe de Peña Nieto. “Seguimos en pie de lucha. Algunos de los compañeros regresaron a los estados para reorganizar a las bases, pero a partir del domingo regresarán y el lunes estarán apoyando las movilizaciones que se decida la asamblea nacional”, señala Rubén Núñez, líder de la Sección 22 de Oaxaca

Agencia Reforma

Ciudad de México

Maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) levantaron ayer los cercos que mantenían sobre las sedes del Senado y la Cámara de Diputados.
Desde muy temprano, en Paseo de la Reforma, los profesores desataron lonas, empacaron casas de campaña y se marcharon con sus cobijas al hombro.
Luego de las negociaciones con el Gobierno federal, los líderes de la CNTE también ordenaron el repliegue de los maestros que estaban acampados en San Lázaro.
Docentes oaxaqueños de Miahuatlán, la Mixteca, Etla y La Cañada, lanzaron silbidos y arengaron a reubicarse en el campamento del Zócalo.
“A ver, compañeros, ya es una decisión tomada: sí nos vamos a ir. Es un consenso luego de la mesa de diálogo que hay con el Gobierno federal. Nos vamos, pero de forma organizada”, decía a las ocho de la mañana un profesor de la región de la Costa.
Una hora después, la mayoría de maestros había despejado París, Madrid y Reforma, calles que circundan las instalaciones del Senado.
“Nos vamos, pero vamos a regresar, cabrones”, gritaron los disidentes a los elementos de la Policía Federal que resguardan el recinto legislativo.
“Es uno de los acuerdos, pero no está definido nada todavía. Siguen las movilizaciones. Esto es parte de los acuerdos tomados y va a depender mucho de los avances de la negociación para que el movimiento vaya tomando decisiones”, advirtió otro profesor a través de un altavoz.
En San Lázaro, los maestros completaron el retiro a las 11 de la mañana, cuando el Palacio Legislativo sólo seguía vigilado por federales.
“Ya, camaradas, no hay nadie a quien hacerle bulla, nos vamos. Esto no es negocio”, gritó Manuel Medina, profesor de los Valles Centrales de Oaxaca.
Los disidentes irrumpieron en San Lázaro desde el pasado 19 de agosto, cuando trataron de impedir la aprobación de las leyes secundarias de la reforma educativa.
Los enfrentamientos de ese día dejaron un saldo de 20 policías federales heridos.
Un día después, los maestros se plantaron a las afueras de la Cámara baja manera indefinida, lo que orilló a los diputados a sesionar en el Centro Banamex, donde aprobaron dos de las tres leyes secundarias.
El jueves pasado, el magisterio disidente cercó el Senado también para intentar impedir que avalaran las minutas sobre las leyes del INEE y General de Educación.
Los senadores se fueron al Centro Banamex, donde los maestros también aparecieron pero no impidieron el desarrollo de la sesión extraordinaria.
San Lázaro estuvo bloqueado en sus accesos principales, además de calles aledañas como Congreso de la Unión, Eduardo Molina, Sidar y Rovirosa, Cecilio Robelo y Emiliano Zapata.
Ayer mismo, cuadrillas de trabajadores de limpieza se encargaron de barrer los espacios que desalojaron los docentes.
A pesar del repliegue de la CNTE, las sedes del Congreso de la Unión siguen resguardadas por la Policía Federal.
Incluido el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde el viernes pasado los profesores cercaron los accesos a la terminal aérea por más de 11 horas.
Movilizaciones y negociaciones, en forma paralela, anuncia

A pesar de las negociaciones con el gobierno federal y el acuerdo de quitar el cerco a las instalaciones del Congreso, los maestros de la CNTE aprobaron una gran movilización el próximo primero de septiembre en la capital del país.
Rubén Núñez, líder de la Sección 22 de Oaxaca, adelantó que, en el marco del primer Informe del presidente Enrique Peña Nieto, marcharán en repudio a las reformas promovidas por el gobierno federal.
“Ya es un acuerdo nacional la marcha, sólo será cuestión de coordinar los trabajos no sólo de maestros, sino de otras organizaciones sociales que también tienen la intención de participar”, dijo Núñez en entrevista.
La movilización, que en un principio también estaría apoyada por el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), fue propuesta por la sección 22 del magisterio, la cual, en su mayoría, bloqueó el viernes los accesos viales hacia el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
–¿Estas movilizaciones serán a la par de las negociaciones con el gobierno federal?, se le inquirió.
–”Sí, porque es un acuerdo a nivel nacional en donde, insisto, no sólo participan maestros, sino otros sectores de la población que también están coincidiendo en este sentido.
“En la CNTE, tendríamos que coordinarlo para que no se dé de manera desorganizada y, sobre todo, tenga la contundencia en la exigencia de que se paren ese tipo de reformas que están aplicando, como dicen ellos, de manera estructural”, explicó.
–¿Avanza o no el diálogo con el gobierno federal?, se le insistió.
–”Siempre ha sido una exigencia al gobierno federal de que atienda las demandas del magisterio a través de pliegos petitorios y sus mesas de negociación. No nos vamos a retirar en tanto no se cumplan muestras demandas, compartidas con el resto de secciones movilizadas en el DF. La relación con el gobierno federal será en el sentido de cómo vayamos avanzando en la respuesta a nuestros planteamientos”, agregó Núñez.
“Seguimos en pie de lucha. Algunos de los compañeros regresaron a los estados para reorganizar a las bases, pero a partir del domingo regresarán y el lunes estarán apoyando las movilizaciones que decida la asamblea nacional”, apuntó.
Los líderes de la Sección 22 se reunieron en las instalaciones del Sindicato Mexicano de Electricistas, donde aprobaron varias acciones.
Después, se encaminaron al Zócalo para asistir a la asamblea nacional representativa, donde discutieron la logística de sus nuevas acciones. Hasta el cierre de la edición, discutían los resolutivos elaborados por sus dirigentes en la sede del SME.