Sigue el Ejército en pueblos amenazados por sicarios, contradice Martínez Garnelo a desplazados

Sigue el Ejército en pueblos amenazados, contradice Martínez Garnelo a desplazados

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

A pesar de que los desplazados de Tula del Río y Huautla, municipio de Heliodoro Castillo, denunciaron el domingo que ya se retiró el Ejército de sus comunidades y que temen nuevas agresiones y amenazas de sicarios que los obligaron a salir de ellas, el secretario de Gobierno, Jesús Martínez Garnelo, aseguró ayer que sigue habiendo vigilancia del estado y del mismo Ejército Mexicano.
El domingo, vía telefónica, vecinos de Tetela del Río y Huautla informaron que desde el jueves de la semana pasada los militares se retiraron de las poblaciones y que no saben si aún permanecen en El Caracol donde también había un destacamento.
Consultado al respecto ayer en un receso de la reunión que tuvo en una sala de la Secretaría de Gobierno con coordinadores  de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) de las casas de Justicia de San Luis Acatlán, Zitlaltepec y Espino Blanco, el secretario de Gobierno no quiso proporcionar el número de desplazados que todavía hay en diferentes partes de la entidad, pues dijo que las mismas familias se los han pedido por seguridad.
Aseguró de entrada que cuando menos los desplazados que se encuentran refugiados tanto en Acapulco, como en Tecapan de Galeana, “están apoyados por toda la plataforma política del gobierno del estado, y, obviamente, aquellos que han manifestado cierto temor por las cuestiones de la delincuencia organizada están apoyados por el Ejército, incluso la Policía Estatal está apoyando esta parte”, aseguró.
–Pero los que regresaron a sus comunidades dicen que allá ya no hay Ejército.
–Bueno, hay que puntualizar, porque son tantísimos casos…
–Los de San Miguel Totolapan y Helidoro Castillo, –se le precisó.
–Los de San Miguel, los de Tlacotepec, en donde ya no tenemos ninguno, hasta donde tenemos entendido el Ejército tiene el apoyo correspondiente, por ejemplo de las Chescuitas, pero muchas familias ya no quieren regresar, buscan otras alternativas, y allí también el gobierno del estado es respetuoso.
–Oficialmente cuantos desplazados quedan.
–En cada región hay un número determinado, pero ellos nos han pedido que por previsión no digamos el número de familias y el número de personas, ellos mismos nos han pedido que guardemos la discreción.