Imparten un taller de mercadotecnia para profesionalizar el trabajo cultural en Acapulco

Óscar Ricardo Muñoz Cano

Con la certeza de saber que falta profesionalización en el trabajo cultural que se lleva a cabo en Acapulco, y una carencia de la información necesaria para mejorarlo, es como durante estos meses se está impartiendo el taller Marketing para la cultura y las artes, en el Centro Cultural Domingo Soler.
En entrevista, y al término de la segunda sesión de cinco, el maestro en mercadotecnia, Javier Reyes Martínez, reveló que actualmente a la gente le cuesta mucho trabajo aceptar que la cultura también es un producto y como tal debe ser pensado; “muchas veces se tiene el prejuicio de estar prostituyendo el trabajo cultural cuando es al contrario, se trata de que el propio trabajo se difunda de mejor forma, llegue a más gente y por supuesto, sea rentable”.
Al respecto, abundó en que uno de los paradigmas a romper es el hecho de que “dependemos mucho del gobierno para realizar proyectos culturales, cuando se pueden llevar acabo sin ellos”.
No obstante, afirmó que las becas y los estímulos son necesarios, así como una obligación de los gobiernos, “pero claro, no podemos depender exclusivamente de ellos porque eso fomenta una codependencia, y eso es nocivo para ambas partes: creador e institución”.
Asimismo, mencionó que es común la falta de conocimiento acerca del público al que se pretende llegar; “en realidad no conocemos a nuestro público, no sabemos qué hace, a qué se dedica y cuando eso ocurre no puedes plantear estrategias adecuadas para él, ya que nos basamos en suposiciones y decimos: este espacio cultural o este trabajo es para todos, a todos les gusta, pero no ocurre siempre así”.
Entre los objetivos que persigue el taller, Reyes Martínez destacó el que se propone “la profesionalización de la gente relacionada con las actividades culturales de Acapulco en la medida de lo posible utilizando herramientas básicas de mercadotecnia”, y enfatizó que como el tema del marketing es muy amplio y abarca todo lo relacionado con la creatividad, “las herramientas que se ofrecen permitirán que los proyectos sean rentables, lucrativos, elaborados desde un punto de vista de un artista-empresario”.
Marketing para la cultura y las artes, “además se propone apoyar la gestión, producción y difusión de aquellos proyectos que sean rentables, lo que significará que éstos crezcan y además existan otros proyectos más”.
El taller, dijo, es el primer módulo de un curso más completo de marketing cultural y que será complementado con otro de promoción y difusión, que incluirá redes sociales, por ejemplo, y uno más acerca de empresa culturales, donde se verán ejemplos de cómo llenar solicitudes de apoyos con instituciones como Nacional Financiera (Nafinsa) y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).