El enviado de Peña y Astudillo usan la sesión solemne para defender las reformas del gobierno federal

Morelos vuelve con una reforma hacendaria y una reforma energética, dijo el diputado del PRI en la conmemoración del bicentenario del Congreso de Anáhuac celebrada en la catedral de Chilpancingo

Hugo Pacheco León

Chilpancingo

La noche de ayer el gobernador Angel Aguirre Rivero entregó la presea Sentimientos de la Nación, otorgada post mortem a Armando Chavarría Barrera, a Martha Obeso Cázares, su viuda, en la sesión solemne con la que se conmemoró el bicentenario de la instalación del Primer Congreso de Anáhuac y la promulgación de los Sentimientos de la Nación, realizada aquí en la Catedral de Santa María de la Asunción.
La sesión empezó a las seis de la tarde con la asistencia de 41 diputados de un total de 46, luego de que una comisión de cortesía integrada por diputados introdujeron al recinto oficial al gobernador Angel Aguirre Rivero, al representante del presidente Enrique Peña Nieto, el subsecretario de Desarrollo Social, Javier Guerrero García; y al presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Alberto López Celis.
Ya en el salón estaban los ex gobernadores Rubén Figueroa Alcocer y René Juárez Cisneros; los senadores por Guerrero; los diputados federales, secretarios de despacho, los delegados federales; magistrados y consejeros electorales, mandos militares y policíacos y alcaldes.
Prácticamente sitiada esta ciudad por soldados y policías, la gente común y corriente no tuvo acceso a esta sesión, pues fue cercada con mallas metálicas.
Quien presidió la ceremonia como presidenta de la Mesa Directiva, fue la diputada del PRI, Verónica Muñoz Parra, quien luego de los honores a la bandera ordenó a la secretaria, la diputada Laura Arizmendi, que pasara lista a los primeros constituyentes y los diputados dijeron al unísono presente.
Enseguida el diputado aguirrista Alejandro Arcos Catalán –que llevó acarreados, en su mayoría colonos pobres de esta ciudad que a su llegada le lanzaron porras y consignas para catapultarlo como aspirante a la alcaldía de este municipio—, a gritos dio lectura a los Sentimientos de la Nación.
El representante del presidente Enrique Peña Nieto, el subsecretario de Desarrollo Social, Javier Guerrero García, en su breve discurso consideró que conmemorar el bicentenario de los Sentimientos de la Nación muestra que el país “aún tiene que volver a repasar su historia y aprender de ella en un sentido concordante con las ideas y propuestas que le dieron forma; este acto, que hoy celebramos, debe también recordarnos que tenemos un importante saldo social con la mayoría de los mexicanos”.
Indicó que para el gobierno de la República es un privilegio ser testigo y copartícipe  de las celebraciones, porque la reflexión sobre estos hechos conduce a valorarlos en su justa dimensión.
Añadió que a 200 años del Primer Congreso de Anáhuac, sin duda se han logrado “algunos avances respecto de la situación que guardaba la población”.
“Pero nadie podrá estar satisfecho por los resultados, con sólo reconocer y enfrentar los niveles de pobreza prevalecientes en algunas regiones del país, los retos para incrementar la calidad de vida de los mexicanos, el compromiso para mejorar nuestros niveles educativos, por sólo mencionar estos rubros, nos muestran con un rezago respecto a otras naciones que vivieron procesos de independencia semejantes en Latinoamérica”, destacó.
Consideró que el gobierno federal está iniciando con el mismo espíritu reformador de Morelos, los constituyentes del Anáhuac, de los constituyentes del 17, y de Lázaro Cárdenas, “el gran reformador del siglo 20, un conjunto de reformas fundamentales para la nación”.
Recalcó que la reforma educativa, la fiscal-financiera y la energética, que están a discusión en el Congreso de la Unión, “plantean dejar a las nuevas generaciones un México en paz, con equidad, con calidad y con un lugar destacado y responsable en el concierto internacional, y eso no debe ser sólo un propósito, sino un hecho”.
Y alertó el funcionario federal: “Si logramos concretar estas reformas, México habrá dado un paso fundamental para que haya más crecimiento económico y éste beneficie a las grandes mayoría”.
Entonces, Javier Guerrero dio a conocer que trajo la encomienda del presidente Peña Nieto de reiterar al gobierno y al pueblo de Guerrero, “su compromiso para apoyar y consolidar las tareas que ustedes emprenden día con día, para transformar esta entidad y dar certidumbre a todos los ciudadanos”.
“Estaremos brazo con brazo unificando esfuerzos para reformar sustentablemente a este importante estado que ha aportado al país sus esfuerzos y sus mejores mujeres y hombres comprometidos con las causas sociales desde la independencia hasta el tiempo presente”, dijo.
Culminó diciendo que “es necesario continuar trabajando para que el reformar al país tenga el mayor respaldo y acuerdo posible entre las fuerzas políticas y la sociedad mexicana; lograr una gran transformación de México es complejo, porque hay inercias y resistencias que vencer; por ello es indispensable hacer uso de todos los instrumentos del Estado democrático para impulsar el cambio que reclama la gran mayoría de los mexicanos”.

Hace Astudillo largo repaso de la vida de Morelos

Mientras que en nombre del Congreso local, el diputado Héctor Astudillo Flores utilizó la mayor parte de su discurso en hacer un repaso histórico de la vida de Morelos y agradeció la presencia de la familia del extinto diputado Armando Chavarría, su esposa Martha Obesos Cázares y sus hijos Inti, Oswaldo y Omar, así como a su madre, María Isabel Barrera Catalán, todos presentes en la sesión solemne.
Luego, dirigiéndose al gobernador, el diputado Astudillo aseveró que Guerrero “ha sido un pueblo de inconformes, pero de inconformes nobles, porque hemos resistido la pobreza y la marginación; somos una tierra de mujeres y de hombres sencillos, que nos sabemos entregar a la amistad y a las causas justas”.
“No admitimos excesos, abusos, ni ofensas, sabemos ser congruentes y prudentes, pero también nos ponemos de pie ante la injusticia, la indiferencia y la soberbia, para hacer valer el imperio de la ley y el Estado derecho”, dijo.
Entonces el diputado Astudillo le dijo al gobernador: “Le manifiesto nuestro reconocimiento, por su respaldo decidido para lograr esta conmemoración, gobernar a Guerrero no es tarea fácil, se requiere no solamente ánimo, se necesita sensibilidad, habilidad y generosidad, con un pueblo que espera mucho de sus gobernantes; más allá de posiciones y desencuentros políticos, para usted, gobernador Aguirre Rivero y para nosotros lo más importante es Guerrero, y en eso vamos juntos”, y sonaron los aplausos,
Luego aseveró que los tiempos actuales son de desafíos, de retos y de objetivos: “No hay tiempo ni lugar para temores ni vacilaciones. El país demandas transformaciones, escuchando a todos y valorando todas las opiniones y aportaciones; no es tiempo de avasallamientos, ni tampoco de condicionamientos, es tiempo de acuerdos”, señaló.
Héctor Astudillo aprovechó para asumir una postura política y dijo apoyar el Pacto por México porque es un instrumento de concertación.
Y aseguró que a México le urge la paz social, seguridad pública, crecimiento económico, y aseguró que las reforma educativa es importante, pero también son igual de importantes las actitudes de los maestros y de los ciudadanos.
Al representante del presidente Peña Nieto le pidió que le diga que “valoramos sus acciones, como la cruzada contra el hambre”.
Enseguida exaltó que a 200 años de la promulgación de los Sentimientos de la Nación, Morelos vuelve con una reforma hacendaria y una reforma energética.
Y luego de que los diputados vieron cómo el gobernador colocó la presea a la viuda de Armando Chavarría y escucharon el discurso, se terminó la sesión después de cantar el himno a Guerrero.
Antes de la sesión solemne, en el Congreso del estado se instaló formalmente el periodo ordinario de sesiones, a la que asistió como representante del gobernador el secretario general de Gobierno, Jesús Martínez Garnelo, y el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Alberto López Celis.