El Ejército y la Policía Federal vigilaron la ceremonia en la catedral y el zócalo

Fernando Hernández

Chilpancingo

Los tres niveles de gobierno desplegaron un operativo especial de seguridad en el zócalo para la ceremonia por el Bicentenario del Primer Congreso de Anáhuac y la promulgación de los Sentimientos de la Nación.
En la catedral de Santa María de la Asunción se realizó la sesión solemne del Congreso local con la que se conmemoraron los 200 años desde que el general José María Morelos y Pavón presentó el documento Los Sentimientos de la Nación.
Desde la noche del jueves se registraron recorridos por parte de la Policía Federal (PF), el Ejército y la Procuraduría General de la República (PGR) en el primer cuadro de la ciudad.
Se conoció que el jueves por la noche un grupo integrado por alrededor de 25 policías de la PGR, a bordo de por lo menos tres camionetas tipo Suburban,  realizó un operativo en el bar Charco del Indio, que está ubicado en el andador Zapata, a unos 400 metros del zócalo de la ciudad.
Desde la mañana de ayer se observó la presencia de camiones artillados del Ejército en la avenida Juárez, cerca de las instalaciones del Colegio de Bachilleres, y a soldados que recorrían  la zona aledaña a la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac.
Alrededor de las 3 de la tarde personal del gobierno del estado comenzó la colocación de vallas metálicas que rodearon el templo, donde se programó para las 6 de la tarde la sesión solemne del Congreso.
El cerco daba la vuelta a la iglesia y a la vez formaba un camino para que por él pudiera acceder y salir el gobernador Ángel Aguirre Rivero y de esta forma evitar que la gente se le pudiera acercar.
El gobernador llegó a la parroquia unos minutos después de las 6 de la tarde en un convoy de lujosas camionetas, en el que también llegó el senador Sofío Ramírez Hernández.
Aguirre Rivero entró apresuradamente al recinto que en 1813 fue la sede del Congreso de Anáhuac, por la puerta de las oficinas parroquiales que dan hacia la calle Abasolo.
Y en esa calle se quedó el convoy, integrado por unas 10 camionetas de lujo en el que llegó el gobernador.
La puerta fue resguardada por una joven que forma parte de su escolta personal. Sobre la calle Abasolo se podía notar la presencia de hombres armados, pero vestidos con pantalón oscuro y camisas de mangas largas blancas recorriendo la vía.
A momentos se colocaban en las esquinas y se comunicaban entre sí a través de sus radios que usaban mediante dispositivos de manos libres.
En los accesos que fueron colocados del lado de la calle Abasolo había unas mujeres de entre 20 y 28 años de edad que tenían unos aparatos detectores de metales,  y cerca de este acceso había arronzados unos arcos para detección de metales que no fueron instalados.
Por su parte los soldados se colocaron en el área cercana al Tribunal Superior de Justica, que está ubicado a unos diez metros de la iglesia, sobre el zócalo de la capital. Pero también había unos 50 militares que estaban repartidos por todo el zócalo.
Sobre la calle 16 de Septiembre, a espaldas de la iglesia, estaban dos patrullas con policías estatales.
Cerca de las cinco de la tarde llegaron a la plaza cientos de danzantes del Fandango Guerrerense, que conforme fue transcurriendo la tarde fueron ocupando toda la plancha del zócalo excepto una zona que fue reservada para un templete en el que tocó la Orquesta Filarmónica de Acapulco.
Las danzas de las siete regiones se observaron por todo el zócalo, incluso en el frente del Tribunal Superior de Justicia.
A la gente común, o sea para las miles de personas que no podían ni siquiera acercarse a la ceremonia que se desarrollaba en el interior de la Iglesia de Santa María de la Asunción, fue colocada una megapantalla a colores en la que se podía mirar la sesión solemne. La transmisión tuvo fallas prácticamente las dos horas que duró la sesión.
Los hombres armados vestidos de civil, que se desconoce a qué corporación policiaca  pertenecen o si forman parte de la escolta personal de Aguirre Rivero, no dejaban de hacer recorridos por las inmediaciones de la iglesia.
Como a la 7:00 de la noche llegaron elementos de la Policía Federal, quienes entraron por el acceso colocado en la calle Abasolo y caminaron por uno de los pasillos que fue formado con las vallas metálicas.
En el centro de la plancha del zócalo tocó la Filarmónica por poco más de una hora; la primera canción con la que inició su presentación fue la Feria de Chilpancingo y alrededor de las 8 de la noche cerró con la pieza Qué lindo es Taxco.
La ceremonia por el bicentenario concluyó alrededor de las 8 y media de la noche, se prolongó por más de una hora ya que para las 7 de la noche se había programado la presentación de la remodelación de la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac.
Las luces de los faros del zócalo se prendieron poco antes de las 8 y media de la noche, mientras tanto la gente que caminaba en la plaza lo hacía a oscuras.
Por mero trámite el gobernador caminó, detrás del cerco de vallas metálicas, y bajó hasta un área de la plancha del zócalo en la que fue develada una placa conmemorativa por el bicentenario.
Aguirre Rivero no le destinó a esta actividad más de 7 minutos y después de que se develó la placa salió con prisa con dirección a la calle de Abasolo, donde se subió a una camioneta Suburban blanca y se fue.