Monterrey derrota 1-0 al Pachuca

Fernando Vanegas / Agencia Reforma

Monterrey

Bajo la lluvia, el Monterrey encontró el gol y llegó el triunfo. Los Rayados vencieron anoche por 1-0 al Pachuca en el Estadio Tecnológico en un partido pasado por agua y que se jugó en una cancha anegada en varias zonas para obtener  su primer triunfo con José Guadalupe Cruz como director técnico.
Dejando de lado cualquier consideración técnica, por el mal estado de la cancha, fue un buen triunfo de los Rayados que pese a las condiciones mostraron la solidez de los dos anteriores partidos de Liga con el Profe Cruz al frente, pero con la gran diferencia de haber aprovechado una de las pocas ocasiones que crearon.
Después de 10 jornadas, el Monterrey llegó al doble dígito de puntos, al sumar 10 unidades y, aunque sigue fuera de zona de clasificación, la Liguilla no se ve tan lejos a falta de siete partidos por jugar.
Entre dos equipos urgidos, las expectativas del juego no eran las de uno abierto y las condiciones del campo obligaron a ambos preocuparse mucho en no ser quien cometiera el error.
Sin traicionar su estilo de juego, pues ambos intentaron mantener la posesión del balón y resistieron lo más que pudieron a no caer en la tentación del pelotazo, el partido se quedó lejos de ser espectacular.
Fue peleado, forzó a los jugadores a ser precisos en sus pases y a no conducir de más para evitar que el balón se quedara atorado en la cancha. Pero aún así, durante casi todo el primer tiempo se jugó demasiado lejos de las porterías. Ninguno se acordó de intentar de media distancia.
El Pachuca se acercó en la única ocasión que un balón al espacio recorrió la suficiente distancia para encontrar a Fernando Cavenaghi en el área, pero el disparo del argentino fue detenido por Jonathan Orozco.
El Monterrey no mostró signos de desesperación. A pesar de la baja de José Basanta por un malestar estomacal, no tuvo demasiados problemas en defensa y el debut de Marlon de Jesús en el Tec y como titular resultó efectivo.
Aunque al ecuatoriano se le nota a veces desubicado, incluso sus compañeros lo tienen que orientar, casi al final del primer tiempo sirvió de poste para que llegara el primer gol en la era Cruz.
Marlon bajó de pecho el balón en el área y aunque le quedó lejos, Neri Cardozo vino de atrás para colocar el esférico lejos del portero Óscar Pérez y hacer el 1-0 a los 43 minutos.
Ese acierto fue suficiente. Los Rayados no tuvieron gran volumen de llegadas, tampoco el Pachuca. La cancha no dejó jugar a ninguno de los dos y conforme pasaron los minutos y la lluvia arreciaba, lo verde del césped se convirtió en lodo.
Entonces, los dos equipos apelaron a la fuerza para buscar el empate y el otro para mantener su ventaja.
El Monterrey se atrincheró en su campo en los últimos minutos, cuando el Pachuca metía presión con Duvier Riascos, Daniel Ludueña y Othoniel Arce y los volantes que se sumaban.
Cada pelota que acarreaba el Pachuca en el tiempo de compensación era acompañada de silbidos de los 25 mil aficionados que en pleno puente por las fiestas de septiembre y por la lluvia esta vez no llenaron el Tec.
Cuando el silbatazo llegó, hubo alivio en esa gente. El Monterrey volvió a ganar. Después de la tormenta, la calma parece empezar a llegar.