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Sepultan aludes 30 casas en el barrio de San Francisco de la capital y otras 40 están anegadas

*No han recibido ningún tipo de apoyo del gobierno del estado, del municipal ni de la federación, se quejan vecinos

Fernando Hernández

Chilpancingo

Al menos 30 casas en el barrio de San Francisco de Chilpancingo fueron sepultadas por aludes de tierra y lodo la madrugada del lunes. También otras 40 casas del? barrio tradicional permanecen anegadas debido a las corrientes de agua que descendieron por la barranca de Alpoyeca al poniente de la capital.
A lo largo de la calle Ejército Nacional hay cientos de personas con palas, escobas y otros instrumentos improvisados retirando agua y lodo de sus casas y negocios.
Como en otras partes de la ciudad, las autoridades estatales y municipales brillan por su ausencia. Sólo hay militares apoyando a los vecinos, quienes se quejan debido a que el auxilio del plan DN-III-E ha llegado muy tarde.
La calle Ejército Nacional, cercana al panteón municipal de Chilpancingo, desemboca en la entrada de la 35 Zona Militar y por ahí fue por donde bajaron con más fuerza las corrientes provenientes de la barranca de Alpoyeca que se alimenta de los afluentes de la sierra, pero también de las aguas que circulan por el encauzamiento del Río Huacapa, cuyo caudal se incrementó debido a que desde la noche del sábado se abrió el vertedero de la presa del Cerrito Rico.
Según los vecinos consultados ayer, sus casas se comenzaron a inundar desde la madrugada del domingo y hasta el lunes.
Criticaron la indolencia de las autoridades estatales y federales porque el domingo fue el único día en que tuvieron la visita de un funcionario, el alcalde priista de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos.
Todas las casas y negocios que están sobre esa calle se observan con afectaciones debido a la gran cantidad de agua que ahí se vertió.
En esa calle hay una tienda de artículos militares a la que no le pasó nada, “yo creo que lo que pasó conmigo fue un milagro, no me explico por qué no nos pasó nada”, dijo sorprendida la dueña.
De las 12 a las 3 de la tarde en la zona del desastre no se ve a ninguna autoridad estatal o municipal.
Una mujer se acercó al reportero y exigió “que se diga la verdad”, y que se puntualice que no han recibido ningún tipo de apoyo del gobierno del estado,? ni del municipal, ni de la federación.
Conforme se camina hacia el Batallón de los militares se observan los estragos de los tres días de lluvia.
Antes de llegar hay un andador que es conocido entre los vecinos del barrio de San Francisco como El Callejón del Tío Nacho, está de bajada y tiene salida hacia el Paseo Alejandro Cervantes Delgado.
Alrededor del callejón hay por lo menos 20 casas que fueron anegadas por la crecida corriente que desembocó en el encauzamiento del Río Huacapa.
Río arriba la situación es más grave, hay  unas 30 casas sepultadas con tierra y lodo y fueron arrastradas por la barranca.
Los testimonios dicen que las viviendas quedaron bajo el lodo y la tierra la madrugada del lunes, cuando se incrementó la salida de agua de? la presa del Cerrito Rico  al norte de Chilpancingo.
Una de las entrevistadas que trataba de rescatar lo poco que quedaba servible en su casa manifestó que desde el domingo pasado solicitaron el apoyo del Ejército para que interviniera y pusiera en marcha el plan DN-III-E.
Hubo versiones en el sentido de que el domingo Moreno Arcos le solicitó a uno de los mandos militares de la 35 Zona Militar el apoyo, pero no hizo caso.
Los vecinos de la parte alta del barrio, dueños de las casas sepultadas por los aludes de tierra y lodo responsabilizaron a los militares de las inundaciones porque aseguraron que los soldados desviaron el cauce de la barranca para evitar de esta manera que el lodo y el agua entrara a su cuartel del batallón.

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