Hay en Mochitlán unos 2 mil 500 damnificados y 5 mil incomunicados, reporta el alcalde

*Cevero Espíritu Valenzo niega que haya desviado despensas e informa que solicitó al Ejército aplicar el Plan DN-III

Anarsis Pacheco Pólito

Chilpancingo

El presidente municipal perredista de Mochitlán, Cevero Espíritu Valenzo, presentó la mañana del lunes al secretario de Gobierno, Jesús Martinez Garnelo, el diagnóstico de su municipio en el que reportó mil 200 familias damnificadas, unas 2 mil 500 personas, y serias pérdidas en campos agrícolas y ganaderos.
Entrevistado a su salida de la oficina del secretario de Gobierno, el alcalde aprovechó para refutar las denuncias de las que fue señalado por presuntamente desviar despensas, y aseguró que “circuló mucha mala información”.
Reiteró que buscó el apoyo de la Secretaria de Defensa Nacional (Sedena) para que se implementara el Plan DN-III en su municipio, y que ellos mismos le informaron que era el primer presidente municipal que lo solicitaba.
Comentó que hubo mala información y que las despensas no las quitaron los policías.
Dijo que la sociedad civil se organizó para atender la emergencia en el municipio ante la gran demanda de apoyo.
Aseguró que ya se está avanzando, y que la visita del gobernador Ángel Aguirre Rivero fue un “aliento de esperanza” para los habitantes del municipio devastado por la lluvia que duró más de dos días y causó la muerte de dos personas.
“En estos días fui satanizado y donde circuló mucha mala información, que tenía las despensas y que no quería venir a ver la gestión a Chilpancingo; vine tres veces caminando a buscar apoyo”, insistió.
Dijo que gracias a su gestión, en el tramo de los tanques de agua de Petaquillas fue que se inició el trabajo de habilitar la carretera para pasar, y que se está limpiando el paso para que puedan pasar los trabajadores y alumnos.
Explicó que en sus gestiones solicitó al gobierno del estado que los trabajadores burócratas que se encuentran en Mochitlán presten servicio a la comunidad y no se les descuente el día, lo mismo con los alumnos de la Universidad Autónoma de Guerrero.
“Trabajadores de la SEG ahí estarán mientras no haya acceso a la comunidad, para que presten servicio y apoyen en el mejoramiento del municipio”, comentó.
Dijo que en el diagnóstico entregado al gobierno están las afectaciones de estos días, donde destaca la inundación del hospital del municipio, así como la muerte de dos personas en las comunidades y puentes que sufrieron daños y no permiten un tránsito eficiente.
Comentó que es necesario que llegue apoyo de víveres, aunque señaló que muchos habitantes de Mochitlán que están fuera enviaron víveres.
Reiteró que en la cabecera municipal hay alrededor de 150 familias que tuvieron pérdida total de casas, “hay muchas otras a las que se les inundaron sus casas y esas se pueden salvar”.
Las casas quedaron inundadas porque se desbordaron los ríos Huacapa y El Salado, “en todos los márgenes tenemos casas afectadas, no tenemos puentes, casi todos están caídos”.
Recordó que hay más de cinco mil hectáreas de cultivos perjudicadas, “perdimos el centro de salud, no hay medicamentos. Tenemos alrededor de 2 mil 500 damnificados sólo en la cabecera, y en las comunidades hay más de 5 mil personas que están incomunicadas”.