Piden vecinos de los fraccionamientos La Ceiba y Miramar que Infonavit reajuste sus créditos

*A dos semanas del paso de Manuel por Acapulco, aún hay viviendas que no han sido censadas por la Sedesol

Mariana Labastida

Militares continúan con la limpieza de los fraccionamientos La Ceiba y Miramar, construidas por el grupo EVI, en donde no todas las viviendas fueron censadas por empleados de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
Habitantes esperan que el anuncio de la reubicación para los que viven en esa unidad sea cierto y proponen que les hagan un reajuste de sus créditos para poder adquirir una vivienda en otro conjunto habitacional.
Desde la semana pasada militares iniciaron con el trabajo de desavolve de calles de La Ceiba y Miramar I y II, logrando quitar de dos calles el lodo que alcanzó casi el metro y medio en los frentes de las viviendas; sin embargo las lluvias del jueves volvieron a inundar el conjunto habitacional, aunque es menos el nivel siguen estando fangosas las calles que fueron limpiadas.
Para entrar al conjunto habitacional se tiene que hacer por uno de los costados, debido a que la calle donde está la entrada principal de ambos fraccionamientos sigue corriendo agua proveniente del río de la Sabana, que está a unos 30 centímetros del nivel del suelo, por lo que los militares han colocado costales con arena, con lo que esperan disminuir el cauce y poder continuar con los trabajos de limpieza y puedan ingresar vehículos pequeños.
En el interior se observa a militares en todas las calles retirando el lodo que quedó acumulado en los estacionamientos o áreas verdes de las viviendas, haciendo imposible abrir las puertas que están estancadas con el fango. Todavía en las calles interiores de La Ceiba se pueden encontrar charcos y escurrimientos de agua que brota de las alcantarillas.
Rodolfo Fuentes Mejía es uno de los habitantes que está en la tarea de limpiar su viviendas, su vehículo quedó estancando en la entrada de su casa, aún no logran sacar los muebles del interior para terminar de eliminar todo el lodo que hay; comentó que leyó que reubicarían a los habitantes de ese fraccionamiento, por ello solicitó a las autoridades que cumplan con su palabra.
“Todavía vinieron los de Infonavit y nos dijeron que si no nos dijeron que aquí era inundable, eso no lo dicen cuando te ofrecen la casas y uno se confía cuando pregunta sobre los ríos que pasan cerca y te dicen que hay estudios y que no ocurrirá nada”, dijo Rodolfo Fuentes.
Mónica Dominique Martínez Carrillo sugirió que les hagan un reajuste al crédito que tienen para poder adquirir otra vivienda en algunos de los conjuntos habitacionales que no se inundaron, “si nos hacen un reajuste para que podamos comprar en otro lado como Marina Diamante”, dijo la afectada.
En el recorrido hecho en el interior de los dos fraccionamientos se pudo observar que no todos las casas tenían la calcomanía del censo de la Sedesol para indicar que fueron afectadas, y a pesar de que aunque hay viviendas que están habitadas a dos semanas del paso de Manuel por Acapulco que provocó el desbordamiento de ríos y canales.
Afuera se observó a empleados de la Sedesol entregando apoyos a los censados, debido a que esa zona fue de las primeras que se documentó.
Los militares no solamente se encargan de la limpieza del conjunto habitacional, sino también de la vigilancia para evitar que personas extrañas entren a esa zona. Durante los trabajos de limpieza sólo se retira el lodo y con el uso de la maquinaria se evita dañar aún más los vehículos que quedaron atascados.
En el terreno que está detrás de las viviendas de La Ceiba se observaron también vehículos enterrados en el lodo, así como animales muertos.