Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Familias en riesgo no quieren abandonar sus hogares a pesar de las alertas: Protección Civil

*Se contabilizan 14 mil 664 refugiados en todo el estado y aún hay centenares de familias a las que se les ha instado a desalojar sus viviendas. Ofrece la dependencia como albergue el edificio del boliche en la capital

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

El subsecretario de Protección Civil del gobierno del estado, Constantino González Vargas dijo ayer que el Gobierno estatal y el municipal de Chilpancingo están proponiendo a las familias que se encuentran en las colonias en riesgo por deslaves y hundimientos, un albergue temporal en las instalaciones de El Boliche, a un costado de las de Protección Civil.
Sin embargo, agregó que muchas de las familias no quieren abandonar sus hogares a pesar de las alertas de riesgo que les han dado las autoridades estatales, federales y municipales.
De Villas El Parador y Villas Magisteriales informó que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) se responsabilizó del pago de la renta para las familias que tendrán que ser desalojadas.
El lunes, en Villas El Parador, soldados acudieron a intentar desalojar a los colonos, pero el presidente de la parte alta del fraccionamiento, Francisco Lagunas Catalán les dijo que ellos tienen sus mecanismos de protección y que a algunos que ya abandonaron sus casas, les paga la renta el SNTE.
Sin embargo, en las colonias Río Azul y en la Rosario Ibarra de Piedra aún hay vecinos viviendo a pesar de la advertencia del Cenapred, del municipio y del gobierno del estado en el sentido que están en peligro por la posibilidad de que ocurra un deslave por las lluvias.
Los dos primeros asentamientos se encuentran al sur de la ciudad y la Rosario Ibarra al poniente, en la falda del cerro.
“Hay refugios temporales disponibles para las familias a las que ya se les dio la notificación. Se les dijo que en El Boliche, que está cerca del río Huacapa y otros albergues disponibles, a los demás se les está canalizando con familiares, amigos y vecinos, pero se niegan a desalojar en el caso de las colonias Rosario Ibarra y Río Azul”, declaró el funcionario.
Explicó que en las colonias Villas El Parador y Villas Magisteriales, “al parecer es el SNTE quien pagará las rentas. Nosotros no vemos esa parte, nuestra labor es avisarles que están en riesgo”, dijo el funcionario.
González Vargas aceptó que no han podido convencer a todas las familias en riesgo y que no conoce la cifra exacta de las familias que tienen que ser desalojadas de sus viviendas por los riesgos que corren a partir de las lluvias de la tormenta tropical Manuel, sin embargo dijo que son centenares.
“Lo importante es salvaguardar la vida y la integridad física de las personas, pero aunque ya se les notificó con notario se niegan a dejar sus casas, lo cual nos representa un problema”, dijo y aunque no informó sobre qué procederá tras esta notificación a través del notario, sólo dijo que el gobierno cumple con la notificación y que después los riesgos los asumen las familias que omitieron el llamado, aunque también explicó que si la autoridad lo considera pertinente puede obligarlos a desalojar sus viviendas.
Por otra parte, el funcionario aceptó que hay comunidades en riesgo en otras regiones del estado, sobre todo en la región de la Montaña donde afirmó que son nueve los municipios y 45 comunidades que no han podido desalojar por la incomunicación.
Además reconoció que hay muchas familias que se niegan a abandonar sus viviendas porque es su patrimonio, aunque les adviertan que están en riesgo.
González Vargas agregó que a pesar de que hay 14 mil 664 refugiados en todo el estado aún hay familias completas a las que por recomendación no sólo del estado sino del Cenapred se les ha instado a desalojar sus viviendas, aunque la dependencia no les pueda garantizar un nuevo hogar.
En el caso de los municipios de Chilapa, Tixtla y Ayutla, informó que hay comunidades alejadas que no han podido desalojar.
También informó que la dependencia “está trabajando en otras zonas, como en La Pintada y El Edén, municipio de Atoyac, así como en el municipio de San Marcos y Chilapa, “porque aún hay muchas familias que deben estar en refugios, porque estas viven en laderas inestables y zonas de barrancas donde hay agua acumulada y otras circunstancias que les impiden vivir allí”.
El funcionario reconoció que la emergencia actual es desalojar a las familias por la inestabilidad del terreno, la saturación del suelo y porque continúa la temporada de lluvias, por lo que sus condiciones podrían empeorar.
“Nosotros no podemos decirles que les vamos a dar recurso, eso no nos corresponde. Nuestra obligación es salvaguardarlos, pero la gente se niega a dejar sus viviendas”, insistió el funcionario.
El funcionario estatal informó que los gobiernos federal y estatal continúan evaluando los daños, por lo que a dos semanas de la tormenta tropical no tienen una cuantificación exacta de éstos, “nosotros estamos trabajando de manera permanente con el comité de evaluación de daños y atendemos las zonas en donde más riesgos prevalecen luego de la contingencia”, dijo.

468 ad