Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Temen en la Prepa de Tecpan que Rectoría dé salida política al caso del director suspendido

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Maestros de la Preparatoria 6 de Tecpan de Galeana, temen que la administración central de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) negocie una salida política con el director de la escuela, Celerino Mendoza Laureano, suspendido hace cinco meses por irregularidades administrativas y financieras que se estiman en un millón de pesos.
Denunció lo anterior la secretaria delegacional del Sindicato de Trabajadores Académicos de la UAG (STAUAG), Elizabeth Bello Ríos, quien exigió transparencia en las auditorías que se aplicaron al directivo en noviembre de 2011 y que será presentada en la siguiente sesión del Consejo Universitario en los próximos días.
En una llamada a la Redacción, la líder sindical aseguró que un alto funcionario de la UAG les informó que los dictámenes de las auditorías señalan irregularidades por un millón de pesos, que el director no ha podido comprobar.
Afirmó que esta situación se repite en todas las unidades académicas, pero desde Rectoría se les da un manejo político con las corrientes que conviven al interior de la universidad.
Añadió que “si la administración central tiene miedo de que se destape la cloaca, por evitarse un problema mayor y no lo quieren dar a conocer a la opinión publica, estamos mal, debe haber transparencia en el uso de los recursos”.
Bello Ríos recordó que desde hace casi cinco meses la Preparatoria no tiene director, por irregularidades que el funcionario cometió en el área financiera y de control escolar, y aseguró que si en el Consejo Universitario no se le aplica una sanción, los docentes van a ir a un paro de labores.
Entre las irregularidades, denunció que en octubre de 2011 el director no había ingresado a los alumnos de primer año al control escolar, para que los jóvenes fueran reconocidos como universitarios; hizo cobros dobles a los estudiantes que pagaron directamente a una cuenta de la universidad y a él por su inscripción; cobró cambios de turnos, contrató personal foráneo desde que ocupó el puesto, hace año y medio, y relegó a los trabajadores de base.
Recordó que las irregularidades se fueron acumulando hasta que los docentes decidieron intervenir, “hicimos llegar pliego petitorio al Consejo Universitario para que tomara cartas en el asunto, y en noviembre se hizo auditoría financiera de control escolar y de control académico”.
Recordó que en octubre de 2011 la escuela hizo un referéndum para destituir al director y el 15 de marzo pasado se ratificó en otra elección, que se presentará en el Consejo Universitario, que es el único órgano facultado para desconocerlo.
Aunque aseguró que se le encontró culpable en los dictámenes, en la UAG la política permite negociar antes de la sesión del Consejo para que esta persona pueda renunciar a la dirección, y a cambio le ofrecen un premio, un cambio de categoría o año sabático.

468 ad