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La presa Caracol nunca avisó del desfogue, denuncian alcaldes de Tierra Caliente

*El caudal del Balsas destruyó cuatro puentes que unen a ocho de nueve municipios de la región

Los encargados de la presa hidroeléctrica de El Caracol, que administra la Comisión Federal de Electricidad,  nunca reportaron a los municipios de Tierra Caliente el desfogue del domingo 15 de septiembre, y fue hasta en la madrugada del 16 cuando Pungarabato logró conocer el primer reporte porque del ayuntamiento llamaron a la presa para preguntar y se confirmó lo que estaba ocurriendo.
El presidente de Ajuchitlán del Progreso, J. Carmen Higuera Fuentes, confirmó vía telefónica que nunca recibió ningún reporte de que la presa estaba desfogando.
“Nosotros cancelamos el Grito porque ya teníamos ocho familias damnificadas, alertamos sólo porque vimos crecer el río, pero pensamos que era un crecimiento regular por las lluvias, no por la presa”, expresó.
El caudal, que llegó a tener hasta dos kilómetros de ancho, destruyó los puentes de Santo Tomás, Tlapehuala y Ajuchitlán y dejó inservible a la joya de la corona, el puente Miguel Alemán que une a Ciudad Altamirano con Coyuca de Catalán, pues se llevó el terraplén construido del lado de la primera.
El alcalde Higuera que fue hasta el lunes, cuando un convoy del Ejército recibió el reporte de que la presa estaba desfogando, y en ese momento le pasaron el reporte a él, “el Ejército auxilió desde el primer momento, pero ellos no sabían tampoco lo que ocurría”.
En tanto, el alcalde de Pungarabato expresó el 18 de septiembre, en una entrevista, que fue Pungarabato el primero en conocer lo que estaba ocurriendo, pero porque el ayuntamiento se abocó a investigar, y fue en las primeras horas del 16 cuando consiguió el número telefónico de la presa y logró saber que estaban tirando desde 24 horas antes dos mil metros cúbicos por segundo.
Quien tomó las riendas en Pungarabato del operativo de contingencia fue el director de la policía, Alfredo Cruz Valencia, quien fue coordinador de Protección Civil del estado en Tierra Caliente en el periodo de René Juárez, y quien consideró que “podría ser la presa la que soltó agua”, debido a su comportamiento y por eso comenzaron a investigar el número de la presa para preguntar, porque no recibieron ningún reporte.
Pero también el presidente municipal de Pungarabato, Reynel Rodríguez Muñoz, expresó que nunca recibió ningún reporte del desfogue de la presa. El primer reporte por escrito lo recibieron hasta el miércoles 18.
Confirmó que gracias al contacto que ellos hicieron lograron conocer el 16 de las descargas de hasta 6 mil metros cúbicos por segundo, y “fue cuando fuimos a la radio, alertamos en las riberas y como se pudo, porque ya estábamos incomunicados tanto en teléfonos como en carreteras”.
Everaldo Wences Santamaría, alcalde de Tlapehuala, tampoco tuvo reportes de los desfogues.
De su caso, dijo que el primer contacto con la presa lo tuvieron hasta el 19, cuando hicieron público el primer reporte por escrito y dirigido al mismo alcalde, acerca de un desfogue de 2 mil metros cúbicos por segundo, pero cuatro días después de la desgracia.
Rey Hilario Serrano, de Coyuca de Catalán, confirmó que él estuvo alertando a la gente en la radio porque tuvo conocimiento de las lluvias y la tormenta, que estaba ocasionando el crecimiento de los ríos Cuirio y Amuco, que bloquearon la carretera a Ajuchitlán.
“El único reporte que tuve fue el de la policía, que estuvo monitoreando el crecimiento del río y que fue que dejó de crecer cerca de las 12 de la noche del 15 de septiembre, incluso bajó 30 centímetros, pero no hubo otra clase de reporte”, confirmó entrevistado recientemente en la gira de Cuauhtémoc Cárdenas, cuando expresó que “esa noche fuimos con un equipo de sonido y yo casa por casa, alertando”, pero dijo que desconocía que la presa estaba desfogando.
El trabajo de los municipios fue empírico, de acuerdo a su experiencia alertaron, pero no porque tuvieran algún reporte oficial de la presa del Caracol que, como la de Cerrito Rico en Chilpancingo, y La Venta en Acpulco, fueron abiertas en la mañana del domingo 15, cuando el coordinador nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, Luis Felipe Puente, reconoció en entevista radiofónica este martes que desde el viernes 13 la CFE y Conagua habían propuesto ya la apertura de las presas. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

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