“Es una área de transferencia”, dice el dueño del predio donde se vierte tierra y lodo

“Es una área de transferencia”, dice el dueño del predio donde se vierte
tierra y lodo

Karla Galarce Sosa

Camiones de volteo cargados de lodo, tierra y desperdicios que arrastró el río de La Sabana a las colonias aledañas a la Luis Donaldo Colosio, siguen rellenando el terreno ubicado atrás de planta tratadora de aguas residuales, donde también comenzó a extenderse a un vivero junto a zonas de humedades.
Quien se dijo el dueño del lugar y no quiso proporcionar su nombre, comentó que el área, cuya extensión alcanza unos 2 mil metros cuadrados cubiertos de tierra y lodos putrefactos, es sólo “un área de transferencia” para enviar los desechos a otro lado.
En un recorrido por el viejo camino que comunica la zona Diamante con el ejido de Llano Largo, se observó que la cantidad de tierra y desperdicios aumentó respecto al miércoles pasado, después de que los vecinos de la zona denunciaron el vertimiento de los desechos.
“Ésta es propiedad privada y no tengo por qué pedir permiso a nadie”, expuso el supuesto dueño del predio donde son depositadas miles de toneladas de lodo y que ya alcanzaron el lado contrario a ese predio hasta ocupar la calle.
En el sitio se observa flora característica de humedales como pastizales, además de vegetación introducida cubierta de basura y tierra.
Además del terreno ya contaminado –cuya entrada fue prácticamente cubierta por los desechos malolientes y cal–, fue abierto otro predio adjunto para recibir el lodo.
En ese segundo predio se observó a dos empleados de un vivero que efectuaban labores de limpieza en plantas de ornato, palmas y que removían la tierra recién vertida sobre la brecha de acceso para permitir el ingreso de más camiones.
“Quítale más tierra para que pase el camión”, ordenaba el dueño del terreno a un joven que quitaba con una pala el lodo maloliente.
El otro empleado retiraba el polvo de las palmas que delimitan el vivero con una manguera.
El dueño del vivero dijo que ya había perdido mucho dinero y, sin especificar qué dependencia gubernamental, comentó que le pagarían por permitir que su propiedad fuera un centro de transferencia de los desechos.
Al preguntarle si había efectuado algún trámite ante las dependencias locales, estatales o federales para permitir el depósitos de miles de toneladas de lodo y tierra en un área aledaña a una escorrentía de río, respondió tajante que ese es su terreno y por lo tanto no tenía que pedir permiso a nadie.
De acuerdo con vecinos, en esa zona comenzó el vertimiento de tierra, lodo y desperdicios a principios de esta semana, sin embargo, a pesar de que han hecho el reporte a las autoridades federales y estatales como Profepa o Semarnat, Semaren, Conagua o Capaseg, nadie ha ido a verificar la denuncia.