Se contrapone reforma fiscal a la Cruzada contra el Hambre, reclama el agro

Claudia Salazar / Agencia Reforma

Ciudad de México

Empresarios del sector agropecuario cuestionaron la reforma fiscal del Gobierno federal y exigieron mantener la tasa diferenciada del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y la deducción de tierras agrícolas.
Ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, los productores del campo afirmaron que la iniciativa presidencial contiene un fuerte impacto y que se contrapone con la Cruzada contra el Hambre.
“El sector está frágil, con menor desarrollo relativo que otros sectores. La medida es muy drástica, en monto y tiempo; va a reducir la viabilidad de los productores. Con todo mundo hay un trato diferenciado y un marco de política pública especial hacia el sector”, señala el Consejo Nacional Agropecuario (CNA).
“Nos pone en franca desventaja ante nuestros competidores en el mercado interno y externo. No es acorde con lo expresado por el Ejecutivo en su mensaje y propuesta hacia el sector y en la Cruzada contra el Hambre”, dice el documento sobre el impacto de la reforma hacendaria que fue entregado a los diputados.
Citan que se eliminó el trato diferenciado en la tasa del ISR, que pasa de 21 por ciento a 30 o 32 por ciento, y también se canceló la exención de personas morales y físicas.
Además, ya no habrá el beneficio del esquema de tributación de flujo en efectivo.
“Todo ello de un solo golpe, sin un esquema transitorio”, advierten.
Piden mantener un esquema diferenciado, dado que son un sector productivo desigual frente a otros que sí han tenido crecimiento.
El campo, destacan, no ha generado activos, su producción cada vez más es afectada por los efectos —heladas, sequías e inundaciones— del cambio climático.
Precisan que México es uno de los tres países que más redujo su producción de alimentos, después de Sudáfrica y Etiopía.
La reforma plantea eliminar la retención de ISR a los trabajadores eventuales del campo, liquidaciones de distribuidores, adquisición de combustibles y facilidades para sociedades cooperativas de producción pesquera y silvícola.
El CNA propuso considerar el tamaño y capacidad administrativa de los productores, que haya esquemas adecuados para cada productor —exentos, contabilidad simple y régimen de flujo— y que se tomen en cuenta las características y limitaciones de cada rama.
“¿Qué ofrecemos? Aumentar la formalización del sector agropecuario y ser una herramienta eficiente en la fiscalización de las cadenas agropecuarias”, prometen.
Subrayan que el sector primario representa 23 por ciento de la población, genera 6.3 millones de empleos formales y tiene presencia en dos tercios de las entidades federativas.